Tras la polémica sobre el encargo de trenes que no cabían en los túneles de hace un año, CAF ha empezado a fabricar los trenes de cercanías para Cantabria y Asturias.
Según las previsiones de la empresa y de Renfe, el proceso de pruebas en la red empezará en el primer semestre de 2026, lo que permitirá su puesta en servicio y, también, el inicio de la retirada de los trenes que ahora circulan por la red de ambas comunidades.
Las nuevas unidades de ancho métrico serán más accesibles y modernas y estarán mejor conectadas, según se ha destacado en el acto de arranque de su fabricación. Circularán a un máximo de 100 kilómetros por hora y contarán con más de 200 plazas, incluyendo las previstas para personas con movilidad reducida, así como zonas para bicicletas o carritos de bebé. También tendrán wifi, enchufes y USB en todos los asientos, entre otras prestaciones.
«Serán unos trenes modernos y accesibles, con la tecnología actual para viajar siempre conectados», ha subrayado el secretario español de Estado de Transportes y Movilidad Sostenible, José Antonio Santano, que ha sustituido al ministro, Oscar Puente, en el acto, tras anular a última hora su asistencia.
Santano ha destacado que el Ministerio tiene previsto invertir cerca de 600 millones de euros en la red, de los que ya están movilizados 439, casi el 74%.