El Athletic se ha metido por la puerta grande en la final de Copa. Sexta ocasión en la que se clasifica en los últimos quince años. Comandados por los hermanos Williams los rojiblancos sueñan con hacer historia. La última vez que se alzó el título fue en 1984. El equipo de Valverde se ha ganado el derecho a soñar porque se muestra intratable en San Mamés. Al igual que en Liga, pasó por encima de un Atlético de Champions que no consiguió enmarañar el duelo pese a los continuos intentos dentro y fuera del campo.

Este Athletic tiene más fútbol y no le interesa. Cuenta con una generación de jugadores con alas que vuelan sobre el terreno de juego. Los Williams marcaron el rumbo, pero también ha destacado mucho Sancet en una noche para el recuerdo que acababa en goleada con el tercer tanto de Guruzeta y se finiquitaba con las paradas de Agirrezabala para mantener la portería a cero.

El ambiente venía sobrecargado tras los incidentes registrados en los aledaños del estadio con carga incluida de la Ertzaintza. San Mamés rugió desde el calentamiento y el prolegómeno fue de los que ponen la piel de gallina. Tras entonar ‘Lepoan hartu ta segi aurrera’, sonó la versión metal de ‘Haika mutil’ de Su ta Gar y después salió el equipo con un mosaico rojiblanco espectacular. En el fondo norte en el que se ubica desplegaron una pancarta con la Copa y la frase en euskara «Historiak babesten gaitu, garaipena zain dugu». San Mamés ha registrado el récord de asistencia en un partido del Athletic con más de 52.000 especadores.

El Atlético ha saltado con la indumentaria azul y blanca, rememorando sus orígenes ya que se fundó como una sucursal bilbaina. Simeone cumplía su palabra y Griezmann se quedó fuera de la convocatoria, a pesar de que surgieron las dudas sobre su presencia al viajar junto a la plantilla. Los colchoneros arrancaban el choque con ímpetu e intimidaron al Athletic con varias llegadas.

Golpes certeros

Al Athletic le tocaba sufrir en el inicio, pero se ponía por delante en el marcador en su primera aproximación. Sancet combinó con Nico Williams por la izquierda y su centro era rematado de volea a las redes por su hermano Iñaki. Espectacular. La Catedral se venía arriba y coreaba su nombre. Tampoco tardaba en soltar el cántico «Solo hay un Athletic y es el de Bilbao» y el siempre festivo y reivindicativo «Ikusi Mendizaleak».

Descorchado el champán, Nico Williams y Sancet se han soltado con otro baile bajo la lluvia de Bilbo que encandilaba a la grada. Después del mal partido ante el Betis, ambos ofrecían su mejor versión en un día señalado. El pequeño de la saga ha tenido otra buena opción para hacer el segundo con un disparo que se marchaba fuera por poco.

El partido estaba donde el Athletic había soñado. Los rojiblancos podían correr al espacio y el Atlético no estaba fino. Los colchoneros se acercaban con asiduidad a la portería de Agirrezabala, pero tenían el punto de mira desajustado. La defensa de los locales, con Lekue en el lateral izquierdo para cubrir la baja de Yuri, ha pasado sus apuros para contener a los atacantes.

El partido se enfriaba y el Atlético reclamó penalti por una mano de rebote de Williams. Era el acicate para que en la siguiente jugada Sancet conectará con el nueve rojiblanco con un pase en profundidad. Iñaki se metía en el área y servía en bandeja el segundo tanto de la noche para su hermano Nico. San Mamés comenzaba a botar con las bufandas al viento. Impresionante. La grada también recordaba a Aitor Zabaleta, seguidor de la Real que fue asesinado en Madrid por aficionados ultraderechistas del Atlético. La tensión se palpaba y Muniain se enzarzaba desde el banquillo con Lino.

El segundo tiempo también ha empezado con retraso al tener que atender a un aficionado al igual que en la primera mitad. El Athletic estaba crecido y ha tenido ocasiones para hacer rápido el tercero. No ha tardado en caer al recoger Guruzeta un rechace. San Mamés ha gozado por todo lo alto y también se ha acordado de Simeone.

Ahora toca afianzar la plaza europea en la Liga sin perder de vista la cita del próximo 6 de abril en La Cartuja. El Athletic se medirá con el Mallorca del «Vasco» Javier Aguirre. Toca disfrutar e ilusionarse con poder ganar una Copa. El Athletic de Valverde se lo ha ganado en el campo.

Declaraciones

El entrenador del Athletic Club, Ernesto Valverde, ha asegurad sentirse «encantado» de haber eliminado al Atlético de Madrid y clasificarse para una nueva final de la Copa en la que se enfrentarán al Mallorca el 6 de abril en Sevilla y para la que no ve favorito.

«No se puede hablar de favoritos en una final entre dos equipos que no han ganado desde hace muchos años. Va a ser a cara de perro y puede pasar cualquier cosa. Está todo abierto», ha señalado Valverde sobre ese partido de La Cartuja que podrán disputar después de haber dejado en la cuneta a «un gran equipo, acostumbrado a jugar Champions todas las temporadas».

«Sabemos lo que significa para nuestra afición ir a una final de Copa, todo lo que arrastramos y cómo nos empuja como lo ha hecho hoy. Sé que nos van a acompañar a Sevilla y entre todos intentaremos ganar, lo mismo que piensan en Mallorca. Todo puede pasar», ha incidido.
Sobre el partido frente al conjunto colchonero, dijo que el Atlético arrancó «fuerte para nivelar la eliminatoria», pero considera que el 1-0 marcado por Iñaki Williams ha «tranquilizado y estabilizado» al Athletic.

«El primer gol ha sido importante porque sin tener grandes ocasiones veíamos que se estaban rondando el área. Desde el 1-0 hemos ido creciendo con el partido y a partir de ahí ha venido el resultado. Cada vez que cogíamos el balón corríamos y generábamos peligro», ha explicado.

El entrenador del Atlético de Madrid, Diego Simeone, ha felicitado al Athletic Club por el partido de Copa en San Mamés, en el que el técnico argentino admitió que los rivales »hoy han sido mejores».

«Es un equipo que me gusta, gente fuerte que sostiene bien la pelota, que lucha todas las pelotas. Compiten muy bien. Quizás no merecieron ganar en el Metropolitano, pero hoy fueron mejores que nosotros», ha dicho en la rueda de prensa.

«No han sido goles de contragolpe al espacio, no fue cuestión de velocidad sino de habilidad de ganar el duelo. De Wiliams contra Mario (Hermoso) y del otro Williams (Nico) anticipando a los defensas. Eso es velocidad mental, no velocidad de carrera. Resolvieron con velocidad las jugadas que tuvieron en ataque, trabajaron muy bien», ha explicado Simeone.

El presidente del Athletic Club, Jon Uriarte, ha asegurado tras lograr el billete a la final de la Copa que este miércoles ha sido «un día increíble desde la mañana hasta última hora de la noche».

«Ha sido un día increíble desde la mañana hasta última hora de la noche, con una afición que se ha volcado tanto en Bilbao como en Bizkaia y aficionados nuestros del resto de Euskadi demostrando su pasión por nuestro equipo inundando las calles de la ciudad y batiendo el récord de asistencia en el estadio», se ha felicitado un Uriarte que reconoce que no se prodiga ante los medios de comunicación pero que lo ha hecho hoy al tratarse de «una ocasión especial».

«Eso ha continuado con los jugadores, que han hecho un partidazo, han conseguido un resultado increíble y el pase a la final. Ahora queda un pasito más el paso que llevamos tanto tiempo esperando», ha añadido en declaraciones a los medios, refiriéndose a la final del 6 de abril en La Cartuja ante el RCD Mallorca.

Uriarte ha asegurado que el hecho de que sea en su mandato cuando pueda acabarse una sequía de 40 años en la Copa «no es algo en lo que haya pensado».

Nico Williams, una de las figuras del 3-0 al Atlético de Madrid, ha reconocido que ni él ni sus compañeros esperaban «un resultado tan amplio» como el obtenido ante «uno de los mejores equipos de España».

«Pero el Athletic lo puede todo», se ha felicitado, aún asumiendo que en la final de la Copa el Mallorca, su rival, les «va a exigir mucho» en el estadio de La Cartuja.

«El Mallorca es un equipo que ha ganado a la Real Sociedad en su campo y nos va a exigir», ha apuntado, en todo caso convencido de que su equipo puede ganar esa final.

Iñaki Williams ha asegurado que en el primer gol que marcó al Atlético de Madrid le pegó a la pelota «con toda la ayuda de San Mamés».

En declaraciones a Televisión Española, el jugador del conjunto vasco se ha mostrado muy feliz por haber alcanzado una final que peleara con el Mallorca tras vencer 3-0 al Atlético de Madrid. «Era importante abrir el marcador. Le he pegado con toda la ayuda de San Mamés. Ha sido increíble, un partidazo y a disfrutar del momento».

Además, ha hablado sobre el buen partido que hizo junto a su hermano, a quien asistió en el segundo de los tres goles del Athletic:

«Ha salido todo redondo. Nico y yo el año pasado no pudimos disfrutar de una semifinal. Se nos quedó la mala espina y nos hemos podido resarcir. Hemos podido disfrutar y estamos muy felices», ha finalizado.