La Real se prepara con ilusión para el partido del año

El Reale Arena acoge el miércoles el partido de vuelta de la semifinal de Copa tras el empate a uno que firmaron Real y Atlético la semana pasada. Las futbolistas txuriurdines han departido con los medios en Zubieta para hablar sobre sus sensaciones y, sobre todo, ilusiones.

Media docena de futbolistas ha departido con los medios esta mañana en Zubieta.
Media docena de futbolistas ha departido con los medios esta mañana en Zubieta. (Andoni Canellada | Foku)

Zubieta ha abierto sus puertas esta mañana para celebrar un «Media day» que, como ha destacado Natalia Arroyo, «empiezan a ser frecuentes y no es mala señal». No lo es, desde luego, sobre todo en este caso que se debe a la disputa del partido de vuelta de la semifinal de Copa que acogerá el Reale Arena y al que la Real llega con muchas posibilidades de conseguir el billete para la segunda final de su historia tras el empate de la ida contra el Atlético y, sobre todo, por las buenas sensaciones que dejó aquel encuentro. De lo que pasó y de lo que puede pasar ha hablado hoy media docena de futbolistas blanquiazules.

El partido de ida

«Creo que tuvimos un buen control de balón –destaca Manu Vanegas sobre el choque que se disputó la semana pasada en Alcalá de Henares–. Es cierto que no tuvimos muchas ocasiones claras pero sí tuvimos contundencia con ese gol que hizo Amaiur. Y defensivamente también tuvimos contundencia aunque al final encajamos un gol que se nos escapa por poco, por la fortaleza aérea de Gaby». Ana Tejada coincide en que «hicimos un partido bastante consistente, defendiendo bien, atacando bien también, porque no tuvimos muchas pero estuvimos acertadas. Creo que conseguimos un resultado muy positivo que nos trae muy vivas al partido de vuelta».

«Aparte del resultado», Emma Ramírezse queda con que «hicimos un partido muy serio, creo que supimos competir bastante bien. Tuvimos nuestro tramo bueno y nuestro tramo malo pero salimos reforzadas por el hecho de que en los dos supimos competir contra gente tan buena, sobre todo arriba».

Sensaciones

Una mayoría de voces daba al Atlético como favorito para llegar a la final pero el porcentaje se ha reducido tras un partido que ha dejado buenas sensaciones entre las realistas. «Si hay favoritismos, aquí estamos para quitarlos si hace falta –sonríe Elene Lete–. Tenemos ganas de disfrutar y de demostrar lo que somos».

«El equipo está muy ilusionado. Por lo que pasó allí porque en el club, y sobre todo en nuestra sección, la Copa es algo muy especial, nos remueve por dentro», afirma Amaiur Sarriegi. «Estamos con mucha ilusión y muy preparadas. Ahora desconectando y descansando de lo que pasó ayer porque es algo que puede pasar contra el Barcelona pero siempre es complicado encajar tantos goles y más en casa», explica Ana Tejada aunque también reconoce que en este momento «quizá duele un poco menos» una goleada como la del domingo. La riojana asegura que en vísperas de la cita copera, en el vestuario se percibe «un cocktail de emciones pero sobresale la ilusión, las ganas y la  motivación por disputar la semifinal. Estamos a un pasito de la final, ojalá repetir el hito que consiguieron en 2019. Estamos con muchísimas ganas de saltar al Reale y jugar un gran partido».

El rival

El Atlético sueña con llegar a la final por segundo año consecutivo en una temporada en la que parece haber ido desinflándose. Empezó fuerte pero, con un tercio de Liga por delante, es el peor de los cuatro equipos que aspiran a escoltar al Barcelona y hacerse con el billete europeo. No se fía Emma de la irregularidad colchonera. «Han tenido partidos mejores y peores… como nosotras. Pese a que quizá no sea su mejor año, siguen por delante nuestro en la clasificación, es uno de los mejores de la Liga y tienen la capacidad de ir a más», advierte.

Entre las virtudes del Atlético destaca la potencia física de sus delanteras y la creatividad de sus talentosas centrocampistas. Explica Vanegas que «tienen jugadoras veloces arriba y en medio jugadoras que se asocian bien. Leicy, Banini…, son jugadoras que les gusta el balón, saben jugarlo al pie, filtrarlo...». Tejada, que ya tuvo que encargarse de Ajibade en Alcalá, reconoce no ver mucha diferencia si vuelven a emparejarle con la nigeriana o con su compañera Ludmila. «Tienen características muy similares. Son muy fuertes físicamente, muy rápidas… Son atletas puras y son difíciles de marcar pero al final una defensa tiene que estar preparada para todo. La clave es estar superconcentradas todo el partido, atentas a esas carreras y que corran lo menos posible».

El estadio

El Reale Arena, que también abrirá sus puertas para el derbi contra el Athletic del próximo 23 de marzo, acogerá el encuentro. Que se convierta en una ventaja real para las txuriurdines dependerá en buena medida de la respuesta de la afición.

Aunque no sea su «casa» habitual, Amaiur no cree que el equipo vaya a sentirse cohibido por jugar en el esadio. «Quizá si fuese la primera vez… Pero ya hemos jugado unos cuantos partidos allí, no es algo nuevo. Es verdad que no es lo habitual, no es el mismo campo ni los mismos vestuarios, el césped, la gente… Puede notarse pero yo creo que sobre todo se notará para bien si la gente viene y nos da su apoyo». «Cada vez estamos más acostumbradas a los estadios –suscribe Tejada–. Creo que os va a ayudar si todo el mundo viene a apoyarnos y es una olla a presión. Esa ayuda de la afición nos vendrá bien sobre todo para darnos ese puntito extra de energía y de ánimo que quizá en algunos momentos nos pueda faltar».

El partido de vuelta

La eliminatoria llega empatada y ninguno de los dos equipos ha demostrado ser mejor que el otro en los dos partidos que, entre Liga y Copa, han disputado esta temporada. ¿Afectará eso al choque del miércoles? ¿Lo hará el saber que ya no hay un tercer partido para enmendar posibles errores? ¿Dónde puede estar la clave del encuentro y, por tanto, de la eliminatoria?

Emma cree que los dos factores más importantes serán la «concentración y la contundencia, ir fuertes, estar muy unidas la línea defensiva y la del medio. Esas ayudas son muy importantes porque a las tres de arriba, con su velocidad, cuesta defenderlas. Son difíciles de defender pero estando todas juntas, unidas y sobre todo concentradas, creo que podremos con ellas».

Vanegas augura un partido «cerrado, de pocos goles. Debemos estar muy atentas atrás para mantener la puerta a cero porque arriba en cualquier momento el gol va a llegar. Tener valetía, ser fuertes en lo que somos en la Real Sociedad, en nuestro juego, que es la idea. Tener el control de juego, que mantengamos nuestra puerta a cero y que ojalá podamos marcar goles». Asume la colombiana que todas en general y las defensas en particular van a «tener trabajo. Tenemos que tener mucha tensión, mucha intensidad, enfocadas a mantener la puerta a cero, en resguardarnos muchísimo y en aplicarnos como defensa contundente que somos».

Cree Vanegas que se notará que éste es el partido de vuelta en el planteamiento de los dos equipos. «Es un partido de noventa minutos que define el paso a una final. Tienes que salir con todo, salir con tus mejores armas, proponerlo, porque además estamos en casa y ojalá tengamos el apoyo de la afición que tanto nos ayuda. Es un partido a muerte y hay que vivir cada minuto con intensidad y como si fuera el último porque no hay más», subraya.

No tiene tan claro Emma que el partido vaya a encararse de forma diferente pero sí que «tenemos que estar preparadas para todo, bien para hacer frente a una versión más conservadora del Atlético, bien ante una más ofensiva, y tener claro lo que queremos hacer nosotras».

Amaiur espera «un partido muy competido. Ellas son un equipo muy físico, sobre todo sus delanteras tienen mucha calidad y velocidad, y tendremos que estar muy atentas». Por esas características y porque a la Real le gusta manejar el balón, es probable que las colchoneras opten por el contragolpe como principal arma. «Tienen jugadoras como para hacer daño a la contra –explica la donostiarra– porque sus centrocampistas ven muy bien los espacios y tienen mucha calidad para meter pases y las de arriba son rápidas y hábiles con el balón. Tenemos que estar preparadas para eso y también para un partido más cerrado porque muchas veces son así cuando hay una final en juego, los equipos muestran más respeto al rival».

Los penaltis

Si el choque de vuelta también acaba con tablas, habrá que irse al punto de penalti. Lete, que ya detuvo uno en la ida, asegura estar preparada y tranquila. «Se mira un poco todo –explica, respecto a la preparación–. Luego es intuición, tiene algo de suerte… También creo que para las jugadoras es más “tengo que marcarlo” y para las porteras es más “si lo paro muy bien y si no, es que no puedo hacer más”. Pero sí se trabajan, se ven posiciones del cuerpo...».

Si a la portera de Zumarraga no le quita el sueño tener que jugársela bajo palos, a Tejada tampoco le temblará el pulso si se da el caso. «Si toca, habrá que tirarlo. Ojalá no lleguemos porque eso significará que el partido ha sido muy largo y que se ha sufrido. Pero si toca, doy un paso adelante y sí que tiraría», asegura.

Los nervios y la presión

No todos los días se pelea por una final y la motivación puede acabar dañando por exceso. Mantener los nervios a raya será uno de los retos para estas futbolistas, que se muestran ambiciosas ante la posibilidad de alcanzar uno de sus sueños.

Emma explica que «antes del partido todo el mundo tiene ese puntito de nerviosismo pero yo al menos nada más empezar el partido, se me pasa, así que por ese lado estoy bastante tranquila. Es más difícil defender bien ante un rival así y aportar al equipo que hacer frente a los nervios».

Vanegas, además, recuerda que estos son los partidos que las futbolistas quieren jugar y que «el deportista de alto rendimiento quiere vivir esto, esta presión, esta responsabilidad y por esos objetivos». Ella está «muy ilusionada, con muchas ganas. Es mi primera semifinal, en casa…» y uno de esos partidos a los que se aspira cuando se firma con un equipo. «Como jugadora ambiciosa, como deportista a la que le gusta ganar, es algo que está en ese largo plazo, vivir cada partido como se debe, ir paso a paso, pero también tener ese foco de que lo que quiero es jugar finales, jugar por títulos, ganarlos… Lo tengo muy presente, lo visualizo y espero que así sea».

La final

A veces cuesta mencionarla, por aquello del gafe, pero Tejada reconoce que a veces se habla en el vestuario «y te la imaginas. Es que es algo que toda jugadora quiere vivir. Aunque somos muy conscientes de que hay que ir paso a paso». La riojana vivió la de 2019 desde la distancia y le han contado «muchas cosas. Que fue muy dura, que la fiesta también fue muy dura –se ríe–, que se disfrutó mucho… Fue una vivencia especial para la Real y para todo Donosti. Yo viví la semifinal desde la grada porque vine a verles aunque no estaba en el club entonces. Esta vez espero poder ayudar desde dentro».

«Y solo recuerdo haberla visto por televisión pero me han hablado mucho –explica Emma–. Y oir cómo lo cuentan, con esa ilusión, es una motivación extra. Ojalá llegar a la final y que podamos repetir todo».