En un acto realizado en el frontón Labrit de Iruñea con motivo del Día Internacional de la Salud Laboral, ELA ha señalado que en Hego Euskal Herria se necesitan al menos 165 inspectores de trabajo, 120 en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, y 45 en Nafarroa.

Así lo ha asegurado en su intervención Pello Igeregi, responsable de Salud Laboral de la central, quien ha insistido en que la petición es «factible a corto plazo si hay voluntad» y por ello, ha considerado imprescindible interpelar a las instituciones.

Ha destacado que «la apuesta de ELA contra la precariedad laboral también es una apuesta por la salud de las y los trabajadores» y que las cifras de muertes laborales «son inadmisibles».

400 trabajadores muertos al año

En este sentido, ha denunciado que «las empresas sitúan los beneficios económicos por encima de la vida. En consecuencia, y con la complicidad de las instituciones, cada año mueren 400 trabajadores y trabajadoras tanto por accidentes como por enfermedades laborales. Es inaceptable que por no respetar las medidas de prevención mueran 400 personas trabajadoras cada año en Euskal Herria y que eso no sea una prioridad política».

Además, ha recordado que Osalan señala que «la mitad de los accidentes laborales se producen en los dos primeros meses de contrato. Pues bien, el 56% de los contratos de Hego Euskal Herria tienen menos de un mes de duración».

En el acto celebrado por ELA en Iruñea también ha participado la catedrática de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la UPV, Olga Fotinopoulou Basurko, quien ha asegurado que la actual normativa «no tiene carácter preventivo, sino que se trata de una ley que responde tras el accidente, estableciendo únicamente medidas disciplinarias para las y los responsables, lo que es totalmente reprobable».

Y ha subrayado que la ley «tiene lagunas en los casos de acoso», pero que «se puede utilizar el convenio de la Organización Internacional de Trabajadores para presentar denuncias en este ámbito».

Tras el acto, participantes en el acto se han manifestado desde el frontón hasta el Parlamento de Nafarroa bajo el lema ‘Hiltzera kondenatzen gaituzte’ para exigir a las instituciones que aumenten la cifra de inspectores.