Los sindicatos LAB, CCOO y UGT han alcanzado este lunes con la patronal un preacuerdo en el convenio de Hostelería de Bizkaia con vigencia hasta 2027, que ELA rechaza porque «abre la puerta a los contratos fijos discontinuos a tiempo parcial», ha explicado esta central. Para LAB, «además de descongelar los salarios, obstaculiza las vulneraciones, fraudes y abusos del sector».
Para los sindicatos firmantes, la prioridad en la negociación de este convenio, que llevaba sin renovarse desde 2019, ha sido regularizar las condiciones de trabajo de los y las trabajadoras del sector. Tras varias jornadas de huelga y numerosas movilizaciones, ha llegado el acuerdo del que ELA se ha descolgado.
Se garantiza la recuperación del IPC de los últimos años aplicándose la actualización al salario desde el 1 de mayo, que se traduce en un incremento del 12,2%, posteriores subidas del 0,5% en 2025 y 2026, y 1,6% en 2027.
LAB apunta a que «es de los pocos convenios que desde la pandemia garantiza el aumento del IPC directamente en los salarios, no mediante revisiones durante o a fin de vigencia». Respecto a la jornada, se produce una reducción de 4 horas, fijándose en 1.746 anuales.
LAB incide en que ha luchado especialmente para garantizar que este convenio sectorial sea el «paraguas» de más trabajadores y trabajadoras, incorporando a la restauración moderna, de modo que «se abre el camino a que se les aplique el convenio de Bizkaia»; riders, a quienes se les abonará un plus de 60 euros en concepto de peligrosidad; y colectividades.
Asimismo, atendiendo a que las mayores vulneraciones y fraudes se dan en la jornada y la contratación, se establece el fichaje electrónico obligatorio en todas las empresas. «En este sector, el fichaje sigue siendo un mito, y si se hace es con trampas. Con sistemas electrónicos podemos controlar más fácilmente el uso de horas extras, los excesos de jornada, los descansos obligatorios...», exponen desde LAB.
Se regularizarán los contratos fijos discontinuos para evitar fraudes, limitar su uso y garantizar su jornada mínima. Las jornadas mínimas garantizadas en contratos fijos discontinuos a tiempo parcial serán de 10 horas semanales en colectividades y 4 horas diarias en hostelería.
«Muchas veces se utilizan de forma fraudulenta y la ausencia de regulación facilitan los abusos. Se limitan los casos en los que se pueden utilizar, regulamos su llamamiento, las preferencias para vacantes ordinarias, se establece una jornada mínima..», señalan.
Desmarque de ELA
En una nota, ELA ha indicado que la reforma laboral posibilitó la extensión de la figura del contrato fijo discontinuo, pero ha puntualizado que la modalidad de fijo discontinuo a tiempo parcial «debe ser acordada en convenios de ámbito sectorial». «Es decir, que las partes negociadoras deben acordar incluir esta modalidad contractual en el convenio. De lo contrario, no se podrían celebrar», ha indicado.
ELA ha denunciado que se trata de «un contrato precario para regular jornadas intermitentes y parciales», por lo que ha considerado que «es un error permitir y extender este tipo de contratos en el sector».
Según ha avisado, «añadir a las jornadas parciales que puedan ser además fijas discontinuas significa darle carta blanca a las empresas para que puedan disponer/llamar a las personas trabajadoras que quieran para realizar jornadas de 4 ó 5 horas diarias y de manera intermitente, por ejemplo».