Aitor Agirrezabal
Aktualitateko erredaktorea / Redactor de actualidad

El laborismo promete reducir la inmigración y legislar para contratar primero a británicos

La inmigración es uno de los grandes debates de la campaña electoral de cara a los comicios de julio en el Reino Unido y el Partido Laborista ha comprado el discurso conservador: control de fronteras, leyes para contratar «primero a los británicos» y reducir las cifras de migrantes.

Keir Starmer, candidato laborista, durante un acto el pasado viernes en Glasgow.
Keir Starmer, candidato laborista, durante un acto el pasado viernes en Glasgow. (Andy BUCHANAN | AFP)

«Lean mis labios: reduciré las cifras de inmigración. Si me das las llaves del número 10, te haré esta promesa: controlaré nuestras fronteras y me aseguraré de que las empresas británicas reciban ayuda para contratar británicos primero», ha asegurado el líder del Partido Laborista y favorito en la elecciones del.4 de julio, Keir Starmer, en una entrevista a ‘The Sun on Sunday’.

El discurso anti-migratorio está calando con fuerza en toda Europa. También en el Reino Unido, donde a las políticas del conservador Rishi Sunak, con su propuesta de enviar a los solicitantes de asilo a Ruanda, se le suma ahora la promesa de Starmer de «reducir la inmigración» y legislar para que las empresas contraten primero a ciudadanos británicos.

«Los británicos primero» (Britains first) es, además de una formación de extrema derecha, un lema habitual de los distintos grupos ultras de las islas.

Starmer ha camuflado estas políticas antimigratorias como políticas sociales para los ciudadanos británicos. «No sólo hay que hablar de una migración altísima, sino actuar en consecuencia. A los empresarios que infrinjan la legislación laboral, como por ejemplo al no pagar a su personal el salario mínimo, se les prohibirá contratar trabajadores del extranjero», explica.

El líder laborista ha acusado a los Conservadores de prometer «constantemente» que van a reducir las cifras de migración y «fracasar» en ese intento. «Nunca han tenido una estrategia para afrontarlo».

«La cifra neta de migración del año pasado de 685.000 personas tiene que bajar», afirma Starmer, al referirse al dato correspondiente a trabajadores extranjeros en situación legal que entraron frente a los que salieron.

Además, ha asegurado que ligará la posibilidad de migrar al Reino Unido con la formación académica y laboral de quien quiera vivir en las islas. Sin embargo, ha prometido que legislará para vincular el sistema de inmigración a la capacitación, de modo que las empresas que soliciten visas de trabajadores extranjeros puedan en cambio capacitar primero a británicos para realizar los trabajos.