Con una protesta ante la sede de la empresa armamentística ITP Aero en Barakaldo, activistas de la coordinadora antimilitarista Kakitzat han denunciado este jueves la «implicación de esta empresa en el genocidio del pueblo palestino».

Según han argumentado, ITP Aero colabora con el mantenimiento de los aviones del ejército israelí «que bombardean salvaje e indiscriminadamente la franja de Gaza». También destacan que la actividad militar de ITP Aero conlleva la fabricación de componentes para el Avión de Combate Europeo y el ‘Futuro Sistema Aéreo de Combate (FCAS)’.

Esta compañía vasca, dedicada a la fabricación de componentes para motores de aviación, ha visto cómo se disparaban sus beneficios hasta los 158 millones de euros gracias a la recuperación del sector aeronáutico y en concreto a su apartado militar. De hecho, cerró 2023 con unos ingresos récord de 1.305 millones de euros, un 25% más respecto de 2022.

Kakitzat también denuncia la «cada vez mayor implicación institucional con las empresas de armas frente a los recortes en sanidad, pensiones, políticas de igualdad, prestaciones sociales o en las posibilidades de acceso a una vivienda digna».

«Prueba de la cada vez mayor implicación institucional con la industria militar es que el Gobierno Vasco subvenciona, vía presupuestos, con 100 millones a la industria de la guerra vasca. Fábricas de armas, principalmente ligadas al sector aeronáutico, como es el caso de ITP Aero», indica la agrupación antimilitarista.

La movilización ante la sede de ITP Aero en Barakaldo también se ha desarrollado en apoyo a la Martxa por Ezkerraldea que este sábado 15 de junio recorrerá las principales calles de la Margen Izquierda en denuncia de las situaciones de precariedad y pobreza que sufren miles de familias de la comarca.