Amaia Ereñaga
Erredaktorea, kulturan espezializatua

Kulunka se alza con dos premios Max y la navarra Natalia Huarte recibe el de Mejor Actriz

El ‘Forever’ de la compañía Kulunka e Iñaki Ricarte se ha llevado dos de los cuatro  Max a los que optaba –Mejor Dirección de Escena y Mejor Autoría Teatral–, a la vez que una emocionada Natalia Huarte se ha alzado con el de Mejor Actriz en la entrega que ha tenido lugar en Tenerife.

Iñaki Ricate, Garbiñe Insausti, Edu Cárcamo y Jose Dault posan con el Max a la Mejor Autoría Teatral.
Iñaki Ricate, Garbiñe Insausti, Edu Cárcamo y Jose Dault posan con el Max a la Mejor Autoría Teatral. (premios MAX)

No ha sido una mala noche para el teatro vasco; al contrario, la ‘cosecha’ obtenida por nuestra escena en los premios del teatro estatal, que celebraba también el 125 aniversario de la SGAE, ha sido importante en cuanto a reconocimiento: han sido tres de los galardones más importantes.

La gala celebrada en el Auditorio de Tenerife Adán Martín ha arrancado en catalán y castellano, gracias al homenaje tributado al poeta y dramaturgo canario-catalán Angel Guimerá, cuya vida y obra se han convertido en el eje narrativo de la gala de entrega de los premios Max de este año. Ángel Guimerá y Jorgea​ (Santa Cruz de Tenerife, 1845-Barcelona, 1924) fue uno de los máximos exponentes de la Renaixença o ‘resurgimiento’ de las letras catalanas a finales del siglo XIX, un dramaturgo que era ídolo de masas y un autor, hijo de catalán y canaria, que se convirtió en uno de los padres de las letras catalanas.

Y ha habido, como es inevitable, mucha presencia del teatro catalán en esta gala. Una cita en la que la siempre brillante Nuria Espert ha recibido el Max de Honor por su trayectoria –ha sido recibida por largos y calusosos aplausos–, y José Sacristán ha recibido, a su vez, el Max Aplauso del Público por su versión de la ‘Señora de rojo sobre fondo gris’, de Miguel Delibes, con Pentación Espectáculos y Sabre Produciones.

Intérpretes, creadores

Parecía que las quinielas daban como favorita a la actriz Vicky Luengo, por ‘Prima Facie’, pero el Max a la Mejor Actriz ha recaído en la navarra Natalia Huarte, por ‘4.48 Psicosis’, un exigente monólogo que es el testamento de su autora, Sarah Kane, dejó escrita días antes de suicidarse, con apenas 28 años y tras arrastrar una profunda depresión. Obra dura, no es el único montaje importante en el que está involucrada  esta iruindarra a sus 34 años.

El catalán Eduard Fernandez ha sido elegido como Mejor Actor por ‘Todas las canciones de amor’, un monólogo que giró por Euskal Herria en abril del año pasado, un homenaje a su madre, que sufría Alzheimer.

Máscaras

Kulunka partía como favorita con cuatro nominaciones por ‘Forever’, una obra que cuenta con la colaboración el CDN, el Teatro Arriaga y el donostiarra Victoria Eugenia. No se ha llevado el premio al Mejor Espectáculo de Teatro, que ha coronado a ‘Falsestuff. Las muerte de las musas’, del Centro Dramático Nacional, pero sí otros dos importantes: el de Mejor Autoría Teatral, para Iñaki Rikarte –ha competido dos veces con la bilbaina Maria Goyricelaya y su ‘Nevenka’, que se han ido de vacío–y del de Mejor Autoría Teatral, compartido con Garbiñe Insausti, Edu Cárcamo y José Dault.

El alavés Iñaki Rikarte es el director de moda. El año pasado salió de la gala de los Max con premio por ‘Supernormales’; y este entraba encabezando todas las quinielas con ‘‘Forever’’, montaje de la guipuzcoana compañía Kulunka que ha escrito y dirige. Y al recibir el premio, no ha querido obviar que «el teatro es un arte colectivo y no está de menos recordarlo cuando te dan un premio individual», ha apuntado.

Kulunka Teatro no es, de ningún modo, una compañía primeriza. Es más, sus espectáculos han girado por todo el mundo -más de mil funciones en 30 países distintos- y han ganado varios premios como el Max al mejor espectáculo en 2018 por ‘Solitudes’. Todo ello con un teatro de máscaras dirigido a público adulto y joven. ‘Forever’ es una obra que indaga en las relaciones familiares de una pareja con un hijo deseado, cuidado y amado, cuya situación se complica durante la adolescencia del niño.

Por buen camino

En total, siete candidaturas vascas optaban a trece galardones en la 27ª edición de los premios Max, un número que se puede interpretar, sin duda, como una confirmación del buen momento que atraviesa la escena vasca.

A primeras horas de la noche se han ido ‘cayendo’ la mayoría de los finalistas vascos, como los durangueses de Mar Mar Teatro, quienes competían con ‘Arrainak bihotzean/Un pez en el corazón‘ en el apartado de Mejor Espectáculo para Público Infantil, Juvenil o Familiar.

Otro tanto con la representación en danza, aunque lo cierto que han llegado a ser finalistas propuestas tan interesantes como la de los alaveses Proyecto Larrua, con ‘La casa vacía’ –optaban en dos apartados, pero se han ido de vacío–, e integradores, como ‘Yarin’,  que reúne el dantzari Jon Maya (creador de Kukai) y al bailaor Andrés Marín, ambos premios estatales de danza, acompañados por la música en directo de Julen Achiary y ‘Zarra’, el homenaje de la bailaora bilbaina Adriana Bilbao a su abuelo, el icónico futbolista del Athletic, una ‘recien llegada’ que partía con dos nominaciones. 

Tampoco ha podido traer a casa el Max al Mejor Espectáculo de Calle la joven compañía Harrobi Dantza Bertikala, cuyo ‘Geure(R)a’ sí que ha obtenido una mención especial en la Umore Azoka de Leioa.