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Condena exprés a un acusado por la Policía de pasar a migrantes por la muga a cambio de dinero

En una situación de control policial en la muga y de devoluciones en caliente, las policías españolas y francesa han anunciado la detención de un hombre acusado de «traficar» pasando a migrantes «a cambio de dinero». Ha sido condenado en juicio rápido.

Concentración en Irun para denunciar la persecución policial a migrantes en la zona.
Concentración en Irun para denunciar la persecución policial a migrantes en la zona. (Iñigo Uriz | Foku)

La Policía española y la francesa han comunicado la detención en Baiona de un hombre, de 51 años de edad y nacionalizado español aunque nacido en el Magreb, acusado de «traficar con 33 migrantes». Afirman que el arrestado recogía a ciudadanos extranjeros en diferentes puntos de Irun para, a cambio de contraprestaciones económicas, trasladarlos en su coche hasta distintas localidades francesas.

En ocasiones anteriores, este tipo de redadas han alcanzado tanto a personas que ayudaban a migrantes a pasar la muga de modo solidario como a otras que lo hacían por dinero.

El arrestado ha sido condenado en juicio rápido por un juzgado de Baiona a 15 meses de prisión y a la prohibición de entrada en el país galo durante cinco años, según ha informado la Delegación del Gobierno español en la CAV.

Indica que la operación, llevada a cabo de forma conjunta entre las Brigadas de Extranjería y Fronteras de Donostia e Irun y la Oficina de Lucha contra el Tráfico Irregular de Migrantes (OLTIM) de la Policía francesa, se inició cuando los agentes españoles, tras múltiples vigilancias durante varios meses, lograron acreditar que un ciudadano estaba utilizando su coche particular para recoger en diversas localizaciones de Irun a migrantes irregulares y trasladarles hasta el norte a cambio de contraprestaciones económicas.

Procedieron a la detención el 2 de julio y fue condenado el día 4 del mismo mes. La Delegación cita que en los últimos meses también se ha logrado arrestar a cuatro personas por prácticas similares y que han sido igualmente condenadas.

Los controles policiales que intenta impedir el paso de inmigrantes por la frontera que divide a Euskal Herria han tenido como consecuencia una decena de muertes de personas estos dos últimos años, bien ahogadas en el Bidasoa o atropelladas por el tren al caminar por las vías para esquivar la persecución.