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Mueren dos montañeros guipuzcoanos, de 26 y 27 años, en el Mont Blanc

Dos montañeros vascos, de 26 y 27 años de edad y vecinos de Lezo y Oiartzun, han fallecido este miércoles cuando descendían de la cumbre del Tacul, una de las cimas que componen el macizo del Mont Blanc. Un tercero, también oiartzuarra, ha sobrevivido.

Mikel Etxezarraga y Markel Galdos, en una ascensión anterior.
Mikel Etxezarraga y Markel Galdos, en una ascensión anterior. (Utzitakoa)

Dos montañeros vascos, de 26 y 27 años de edad, han fallecido este miércoles en un accidente en el Mont Blanc. Un tercero ha sobrevivido al accidente.

El fatal percance se ha producido a primera hora de la tarde, cuando la cordada de la que formaban parte los alpinistas ha caído desde una altura de unos 100 metros durante un rápel en el corredor de Gervasutti, según un portavoz del Pelotón de Gendarmería de Alta Montaña (PGHM) de Chamonix, citado por Efe. Al parecer ha sido a consecuencia del desprendimiento de un espolón de roca.

Un tercer miembro de la cordada, también de Oiartzun, ha resultado ileso, pero está muy afectado. Una familia del mismo pueblo que estaba en la zona de vacaciones le está acompañando. Allegados de los dos montañeros fallecidos también están de camino.

Un helicóptero de rescate ha podido recuperar los cuerpos de los fallecidos durante la tarde para trasladarlos a la ciudad de Chamonix, capital de los Alpes franceses.

Los fallecidos son Mikel Etxezarraga, vecino del barrio de Altamira de Lezo y natural de Usurbil; y Markel Galdos, nacido en Oiartzun y trabajador del polideportivo de Lezo cuya familia es muy conocida en la localidad al regentar el bar Galdos.

Etxezarraga era ingeniero, había conseguido el máster en la Universidad de Deusto y estaba a punto de empezar a trabajar en Tecnalia.

Galdos había pasado los últimos meses preparando oposiciones a bombero, además de su empleo en Lezo.

Ambos eran apasionados de la montaña y practicaban diferentes modalidades relacionadas con la misma. Antes de acudir a los Alpes habían pasado unos días en los Pirineos.

Una zona compleja

El accidente ha ocurrido cuando los alpinistas descendían de la cumbre del Mont Blanc du Tacul (4.248 metros), una de las cimas que componen el macizo del Mont Blanc, que con sus 4.805 metros de altura es el pico más alto de Europa Occidental.

El Ministerio español de Asuntos Exteriores ha informado de que el consulado en Lyon «está al tanto» del accidente y «en contacto con las autoridades francesas y con las familias de las víctimas para ofrecerles la asistencia consular necesaria».

El pasado día 5, un alpinista murió y cuatro más resultaron heridos en el macizo del Mont Blanc por un desprendimiento de bloques de hielo (séracs) que afectó en total a 15 montañeros de varias cordadas.

En declaraciones a Radio Euskadi, el alpinista Alex Txikon ha explicado que esta parte del macizo se trata de una «zona glacial» ciertamente «complicada». «No tiene nada que ver con lo que podemos encontrar en Pirineos o Dolomitas. Tiene su dificultad y donde menos te lo esperas puede surgir un accidente».

Condolencias y petición de intimidad

En un mensaje publicado en la red social X, el alcalde de Lezo, Mikel Arruti, ha lamentado la «terrible noticia» del fallecimiento de los dos jóvenes, a cuyas familias y amigos ha transmitido sus «más sentidas condolencias».

La primera edil de Usurbil, Agurtzane Solabarrieta, ha indicado también en X que «es una noticia dolorosa». Muestra su «emoción, tristeza y dolor» por el fallecimiento de este joven vecino de solo 27 años y traslada a familiares y amigos «el pésame más sentido».

Joana Mendiburu, alcaldesa de Oiartzun, se ha expresado en el mismo sentido y, en otro mensaje, ha dicho tener «el corazón encogido» por el trágico suceso.

En un comunicado este jueves, el Consistorio de Oiartzun ha trasladado su «conmoción y tristeza» y ha indicado que el vecino fallecido «era una persona que había participado en diferentes asociaciones del pueblo y que había aportado mucho», además de ser «miembro de una gran familia muy conocida en el pueblo».

El Ayuntamiento ha reiterado su «solidaridad y apoyo» a los familiares, así como la ayuda necesaria para «agilizar en la medida de lo posible los trámites administrativos o poner a su disposición la ayuda psicológica».

Finalmente, desde el Consistorio han pedido que se respete su «espacio íntimo». «Oiartzun y los y las oiartzuarras tienen que ofrecer espacios seguros a los allegados de los fallecidos en momentos tan difíciles como éste», plantean.