Una manifestación denunciará en Iruñea el 5 de octubre (18.00, cines Golem) el genocidio que padece Palestina y volverá a reclamar un alto el fuego en Gaza. La misma reivindicación saldrá a las calles de Bilbo el mismo día a las 11.00. En todo el Estado español se han organizado un centenar de movilizaciones y serán miles las que habrá a nivel mundial

En la movilización navarra participarán representantes de la sociedad navarra como sanitarias, docentes, abogados, deportistas, bomberos y vecinos de muchos pueblos que llevan un año denunciando lo que ocurre en Gaza y Palestina. «La manifestación va sin siglas porque queremos que esta movilización sea de toda la ciudadanía navarra que toda ella se sienta interpelada y que todos y todas acudamos para exigir una vez más el fin de esta brutal ocupación y apartheid israelí, como ha confirmado el 18 de septiembre de 2024, por abrumadora mayoría, la Asamblea General de la ONU y exigir el fin del despiadado e inhumano genocidio sobre el pueblo palestino, como exige el Tribunal Internacional de Justicia de la Haya», han explicado en la presentación de la movilización, hoy en Iruñea.

En la misma, han recordado que «en un año Israel ha asesinado a más niños y niñas que en todas las guerras del mundo juntas en los últimos cuatro años» y que ha lanzado sobre Gaza más toneladas de bomba que las que se lanzaron sobre Londres, Dresde y Hiroshima en la Segunda Guerra Mundial; que el 65% de las víctimas son niños, niñas y mujeres; que en Cisjordania, en un año, se ha arrebatado más tierra que en los últimos quince; en Gaza se ha destruido el 70% de las infraestructuras de salud, el 75% de las educativas, el 80% de las mezquitas e iglesias, todo el alcantarillado y las plantas potabilizadoras.

Junto a ello, han destacado que, más allá de Gaza, los colonos israelíes expulsan de sus casas y roban tierras de cultivo en Jerusalén, en Belén, en Jenin y en pueblos y ciudades de toda Palestina.

«Sobran los motivos para movilizarse el 5 de octubre porque nada empezó en octubre de 2023. El sionismo lleva 76 años expulsando a la población palestina de sus casas, robando su tierra, destruyendo sus cultivos y encarcelando a niños, niñas, personas adultas y ancianas por el mero hecho de ser palestinos. La única diferencia en este último año ha sido la brutalidad e intensidad de la limpieza étnica llevada a cabo por Israel y la sobrehumana y admirable resistencia del pueblo palestino», han destacado los convocantes de la movilización de Iruñea.

Testimonio en directo del doctor Salha desde Gaza

Más allá de los datos y de las denuncias, en la presentación de Iruñea ha intervenido, mediante videoconferencia, Mohammed Mustafa Salha, director del hospital Al-Awda de Gaza, que ha sufrido directamente los ataques sionistas en el centro sanitario, como ya contó en NAIZ en mayo.

Salha ha agradecido la solidaridad recibida desde Nafarroa y Euskal Herria, calificándola como «el oxígeno que nos permite seguir resistiendo en nuestra tierra». De este modo, ha subrayado la importancia de volver a llenar las calles el 5 de octubre para reclamar un alto el fuego en Gaza y el fin del genocidio.

El director del hospital Al-Awda ha explicado que Israel intentó ocupar dos veces este centro sanitario, en diciembre y en mayo. En este segunda ocasión les ordenaron evacuar el edificio, pero decidieron resistir y seguir atendiendo a los pacientes. En este año, han matado a seis sanitarios y han bombardeado el hospital ocho veces.

Los ataques israelíes han destruido el 50% de su capacidad operativo de quirófanos. «Si nos destruyen el tercer piso, nos vamos a trabajar al segundo», ha explicado. «Nunca abandonaremos a nuestros pacientes», ha proclamado.

«La humanidad es más fuerte que todos los ejércitos del mundo», ha subrayado para ilustrar su voluntad de seguir manteniendo en pie un hospital asediado constante y brutalmente.

El hospital Al-Awda está especializado en medicina ortopédica. Según ha contado el doctor Salha, la falta de medicinas y de alimentos por la agresión sionista ha provocado que hayan aumentado exponencialmente las infecciones. No hay manera de tratarlas adecuadamente, por lo que las infecciones se propagan. Ante ello, se han visto obligados a realizar numerosas amputaciones, entre ellas a multitud de niños y niñas.

El doctor Salha también ha relatado su situación familiar. Él está en el hospital, al norte de Gaza, mientras que toda su familia está desplazada en el sur. Inicialmente, marcharon a Rafah, pero ya se han tenido que trasladar hasta cinco veces. Su casa familiar fue destrozada por el ocupante israelí y su madre (de 79 años y con cáncer de pecho), su mujer y sus hijos viven en una tienda de campaña que se inundó con las lluvias. «Vivimos en una incertidumbre total», ha resumido. Su situación es la de millones de palestinos en Gaza.