El Pleno del Senado ha votado este lunes la reforma de la ley que adapta a la legislación española los criterios de cumplimiento de condenas coordinados dentro de la UE, la llamada 7/2014. Con ello concluyen teóricamente diez años de incumplimiento vía legal y seis anteriores evitando aplicar el estándar europeo, dos maniobras destinadas a alargar los encarcelamientos de presos vascos, con consecuencias ya irreversibles.
Al contrario de lo ocurrido en las cinco votaciones precedentes de la tramitación de esta ley, esta vez no ha habido unanimidad. Tras las presiones de la AVT y otras organizaciones desde el pasado lunes, PP y Vox se han descolgado. Ello ha hecho que la ley haya sido rechazada por el Senado (111 síes por 148 noes), lo que ha derivado que el presidente del Senado, del PP, haya cerrado la sesión proclamando que el proyecto «queda vetado» y que así se comunicará a la Presidencia del Gobierno.
Para remarcar este concepto, acto seguido, en muy pocos minutos, el Senado ha difundido este tuit:
Al haber sido rechazado por mayoría absoluta, que es la exigida en el artículo 90.2 de la CE para oponer el veto de acuerdo con el artículo 106.1 del Reglamento de la Cámara Alta, ha de entenderse que el Pleno del Senado ha vetado el texto.
— Senado de España (@Senadoesp) October 14, 2024
Vídeo: https://t.co/5MrKSFTVJs
Pese a la afirmación, lo cierto es que con esa votación se cierra la tramitación, que era lo sustancial. Y es que, al no haberse presentado enmiendas anteriormente, el proyecto no debería volver al Congreso, donde fue aprobado sin votos en contra ni abstenciones. Lo que corresponde es publicarlo en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y a partir de ahí empezaría otra fase: la de la aplicación caso por caso.
La maniobra del presidente del Senado apunta a que se busca como sea que el proyecto vuelva a ser debatido y votado en el Congreso, o al menos a dilatar en el tiempo el cumplimiento de la reforma. Pedro Rollán (PP) se ha basado en un informe jurídico de la Cámara elaborado ad hoc y en el que se admite que nunca se ha utilizado esta fórmula.
Desde el PSOE se ha respondido que «lo que se ha producido hoy no es más que un rechazo, un rechazo por mayoría en el Senado pero que debe ser exclusivamente comunicado al Congreso de los Diputados y en ningún caso debe asimilarse a la consideración de un veto como parece querer hacer el presidente del Senado». Se acusa al PP de intentar crear «un conflicto jurídico» entre las dos cámaras.
De momento parece abrirse un impasse corto. Los servicios jurídicos del Congreso se decantan por estudiar la cuestión antes de posicionarse en la reunión del martes 22. Antes tendrían que recibir la notificación del Senado.
Efectos
¿Qué es lo que se pretende dilatar en el tiempo de nuevo? Hay alrededor de 50 presos y presas vascos en el Estado español a quienes hasta ahora se les ha denegado computar el tiempo pasado en cárceles francesas. A algunos de ellos les corresponderá legalmente quedar libres según el nuevo cálculo y otros verán acercado su horizonte de excarcelación. Como avanzó NAIZ, estas personas han superado ya la media de 20 años entre rejas.
Tampoco cabe olvidar que decenas más están libres pero han sufrido una condena extra a consecuencia del desacato estatal al criterio europeo desde 2008. Algo similar ocurrió en su día con la «doctrina Parot» antes de llegar a la anulación europea en 2013.
Blanco por el PP y Caballero por UPN
Marimar Blanco, hermana de Miguel Ángel Blanco, ha sido la encargada de defender la posición del PP. Como ya ocurrió el pasado miércoles en el Congreso, sus compañeros la han recibido con una ovación, puestos en pie. En una intervención contradictoria, ha pedido perdón por el voto a favor anterior del PP al tiempo que ha acusado al PSOE de engañarles. Y ha añadido: «Todavía están a tiempo de pedir perdón ustedes, por cambiar presos por presupuestos. Están muy orgullosos de romper las cadenas de los terroristas más sanguinarios. Lo nuestro es un error, pero lo suyo fue nauseabundo». Se ha referido a la reforma legal como el fruto del «pacto encapuchado con Otegi. Otegi dicta y Sánchez obedece y ejecuta».
Marimar Blanco al PSOE: «Lo nuestro es un error, pero lo suyo fue nauseabundo»
Blanco también ha incurrido en contradicciones al criticar que esta reforma se haya vehiculizado a través de una enmienda al tiempo que defendía que el PP hiciera lo mismo en 2014 en sentido contrario, entonces a través de una disposición adicional que dejaba en agua de borrajas el criterio europeo. Y ha concluido diciendo que «vamos a votar no y cien veces no», tras haber apretado el botón del sí cinco veces en este proceso.
Por parte de UPN, María Caballero (también víctima de ETA como hija de Tomás Caballero) también se ha esforzado en intentar defender que su partido ha sido engañado. Dice haber visto hasta «risas» del ministro Félix Bolaños al citar este tema.
Previamente, María Elena Diego Castellanos (PSOE) ha incidido en la unanimidad alcanzada por esta norma en las fases anteriores: «No entendemos por qué hay que alargar esto si todos estamos de acuerdo en que hay que implementar la normalidad europea. Hasta ahora todos habíamos hecho las cosas con consenso en el Congreso, algo que no se da todos los días, y con total responsabilidad. Ha sido un proceso con luz y taquígrafos y con el resultado excepcional de 346 votos a favor de la ley [en el Congreso] y ninguno en contra».
En su segunda intervención, la portavoz del PSOE ha sido muy enfática, primero al trasladar a Miguel Tellado (PP) que «su infamia le perseguirá de por vida» y luego al asegurar que «no vale todo en política, no vale mentir, ni menospreciar, ni odiar, ni deslegitimar a un gobierno».
EH Bildu y PNV
Por parte de EH Bildu, Gorka Elejabarrieta ha comenzado por «lo obvio»: «¿Cuándo y quién ha hecho trampa? La decisión marco europea es de 2008. El Gobierno del PP presentó un proyecto que recogía literalmente el informe del Consejo de Estado en verano de 2014 en el Congreso, pero cuando llegó al Senado introdujo dos limitaciones de forma torticera. Consiguieron así la ineficacia absoluta del criterio europeo. Esa redacción de 2014 es incompatible con el derecho europeo».
«Ustedes lo que plantean aquí es desobedecer directrices europeas, para alargar las penas indebidamente a los presos vascos. Si es así, tengan la decencia de decirlo. Es la última versión de ‘el fin justifica los medios’», ha denunciado el senador independentista. Ha concluido instándoles a aceptar lo que dicta el tiempo actual, aparcando «el comodín de ETA», y demanda la ciudadanía vasca: «El tiempo de la excepción, el de la política del rencor, el de las leyes ‘ad hoc’, debe terminar».
Elejabarrieta (EH Bildu): «El tiempo de la excepción y de la política del rencor debe terminar»
Igotz López Torre, del PNV, ha considerado que la reforma llega «tarde» y ha defendido la homologación europea, recordando que dependiendo de las cuestiones esta puede ser «tanto favorable como perjudicial para el reo». Echando la vista atrás, ha recordado cómo instituciones europeas llevaban años mostrando su preocupación con la actitud española y cómo el grupo jeltzale en el Congreso ya intentó una modificación legal que no prosperó. «Esta trasposición sí va en línea con la decisión marco europea», ha resumido. También ha querido matizar que «en ningún caso se reducen condenas, sino que ya se han cumplido en otro país».
Por lo que respecta a otros grupos, Sara Bailac (ERC) ha afirmado que el incumplimiento del criterio europeo solo ocurría en el Estado español y ha acusado al PP de usar el Senado como «su plató de televisión y para hacernos perder el tiempo». Joan Baptista Bagué (Junts) ha ironizado con «la excepcionalidad ibérica» comparando esta falta de adecuación a la ley europea con la decisión de hace un siglo de mantener otro ancho de vía ferroviario. Desde Más Madrid, Carla Delgado Gómez (Carla Antonelli) ha leído algunas de las respuestas de víctimas de ETA a la polémica performance del portavoz del PP Miguel Tellado en el Congreso y se ha preguntado «cuánto cotiza hoy la desvergüenza».
Trabas hasta última hora
Tanto PP como Vox habían perseverado en intentar evitar esta reforma en la última semana. El PP emplazó al Gobierno español para retirar el proyecto, dado que era la única forma de que encallara, pero el PSOE se ha negado a ello e incluso ha acabado por reconocer que se estaba incumpliendo el criterio europeo: lo dijo el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, el miércoles en Luxemburgo. En el transcurso de la sesión de este lunes, Blanco ha vuelto a reclamar la retirada del proyecto para evitar «la traición a las víctimas».
Por su parte, Vox ha intentado que se hiciera una nueva trampa para mantener la anterior, interpelando al PP para que impidiera la votación de hoy con su mayoría en la Mesa del Senado. Tal irregularidad ha sido evitada por el partido de Alberto Núñez Feijóo, sabedor de las consecuencias que podría tener una ilegalidad así. El Reglamento de las Cortes dejaba claro que esta votación final tenía que hacerse este 14 de octubre como última fecha. Ahora habrá que ver qué recorrido tiene la rabieta final de declarar vetado el proyecto y hasta dónde fuerza la máquina, porque algunas voces ya apuntan a que el presidente del Senado se arriesga a incurrir en prevaricación.
Paloma Gómez Enríquez, senadora de Vox, ha denunciado desde la tribuna que «este debate nunca se debiera haber realizado» y ha afirmado que no se ha hecho todo lo debido para impedirlo. También ha pedido perdón «de la manera más sentida». Y si el PP ha puesto el foco sobre la referencia de Miguel Ángel Blanco, ella lo ha hecho sobre José Antonio Ortega Lara, «fundador de Vox».
Entre medio, no han faltado voces que afirman que el PP en realidad sabía lo que estaba votando en las anteriores fases de esta reforma, y se ha echado atrás únicamente por las presiones de sus lobbies próximos ideológicamente. Así lo han señalado estos días, con mayor o menor contundencia, representantes de PSOE, PNV y EH Bildu. López Torre (PNV) ha aseverado en el Senado que «aquí no ha habido ningún error intergaláctico, eso cuéntenselo a Iker Jiménez». Y Elejabarrieta ha añadido «¿es que no saben leer, señorías? Yo lo que creo es que ustedes están a favor de esta trasposición europea pero han sucumbido a la presión, y por eso mienten».