
Las dos jóvenes que sobre las 13:30 horas del lunes se encadenaron en un balcón del Ayuntamiento de Burlata para denunciar el posible desalojo del gaztetxe han sido soltadas finalmente este martes por la tarde por los bomberos, tras solicitar ellas mismas ayuda a SOS Nafarroa.
Las jóvenes llevaban 24 horas encadenadas y han sido ellas mismas las que han llamado al servicio de emergencias para que las soltaran, según han indicado a Efe fuentes municipales.
Durante la protesta, desplegaron pancartas en el edificio consistorial con lemas en defensa del gaztetxe y mensajes como «La pelota está en vuestro tejado». Mientras, un grupo de jóvenes acampaba en la plaza.
Gazte Asanblada de Burlata denunciaba en una nota de prensa la «falta de voluntad del Ayuntamiento para alcanzar un acuerdo» con alternativas de otro local.
Por su parte, el Ayuntamiento de Burlata –gobernado por EH Bildu, Contigo Zurekin y Geroa Bai– aclaraba que no se plantea desalojar el gaztetxe por la fuerza y seguirá buscando un acuerdo con los jóvenes para que abandonen el actual edificio que forma parte del proyecto Nogalera 2025.
En un comunicado, el Consistorio ha señalado que el edificio que actualmente alberga el gaztetxe «no es una opción», ya que el proyecto Nogalera 2025 «es importante para Burlada, crucial para reducir el riesgo ante inundaciones».
Nueve reuniones formales y cinco propuestas
Hasta ahora, indica, se han mantenido nueve reuniones formales y más contactos por otras vías durante trece meses, y existen cinco propuestas y contrapropuestas de convenio sobre la mesa.
«Ayer se les volvió a tender la mano para seguir hablando, pero se han negado a hacerlo. Aluden a que el Ayuntamiento tiene que firmar el convenio que ellas proponen. Pero un convenio de cesión de uso debe pasar por pleno y contar al menos con 11 votos favorables», explica el Ayuntamiento.
Por otro lado, ante la acción de encadenarse y «dado que este acto no altera el normal funcionamiento de la institución y respetando su voluntad de permanecer encadenadas», el Ayuntamiento les ha brindado «la posibilidad de marcharse cuando así lo decidan, poniéndose a su disposición para llamar a los bomberos y realizar las gestiones necesarias para soltarse, a lo cual se han negado».
«Reiteramos que este Ayuntamiento tiene voluntad de seguir hablando. Por tanto, respetando que es una protesta legítima, no entendemos por qué están actuando así», concluye.

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