El Valle de los Caídos, ¿valle o montaña? fue pensado por los políticos de antaño, para que fuera «valle» y de los «caídos». Varias décadas mas tarde, los políticos de hogaño han convertido el valle en montaña, y a los caídos los quieren levantados, porque si no fuese así no se hablaría de las dos Españas, la montaña es de odio, que según un émulo del Dr. Freud, es el odio que se tienen a si mismos, por eso no se pueden perdonar, pero que lo salpican a los demás. Ilegales eran ambos, Franco y la II República, Sr. Alvarez Solis, vaya a las hemerotecas y consulte la historia de primera fuente, la historia está para desmontar ideologías y exorcizar a «analfabestias». El primero usó las armas para subir al poder, era consciente hasta el, de hecho, el complejo de ilegitimidad lo acarreó toda su vida; y la II República, también fue ilegal e ilegitima, no fue votada en Cortes Constituyentes (como se requería por Derecho Político y Constitucional), fue un golpe de Estado, o enséñennos las Actas de la proclamación de la II República, y de paso ya, también de la I República. Yo como doctor en Historia Contemporánea, ademas con la Tesis Doctoral versando sobre las dos Repúblicas, no las he encontrado. ¿Se hizo en una taberna? de ahí la España tabernaria, de Azaña. La guerra, nuestra cuarta guerra civil , fue consensuada por ambos, era su única y ultima vía ¡para entenderse! Como dijo Machado, «España cuando emplea la cabeza, embiste». Y es el periódico GARA, democrático y culto a todas luces, amen de independiente, quien publica estas cosas. Estas tesis han sido rechazadas publicar los diarios de izquierda y de derecha de Madrid, que ¡ojo! les une mas de lo que parece.



¿Es la momia de Franco el problema de hoy de los españoles? Algunos pensamos que es una «vendetta» entre políticos sin programa, médicos sin enfermos (Pujol, Gran Guarroming, etc.) abogados sin pleitos, empresarios sin empresa, militares sin destino, etc., mira por donde, los mismos que cita el escritor costumbrista madrileño Mesonero Romanos, al hablar de los militantes del Partido Liberal Progresista, (ahí militaba el general Espartero, un héroe para la historia de España, un villano para Marx, que desde su exilio de Londres siguió paso a paso la historia de España del momento), personajes arteros, «melindriquis», y voceros como el Gran Guarroming en la TV Sexta, un aflorar de las dos Españas, ambas carne de psiquiatra, se profesan un amor odio enfermizo, no pueden vivir una sin la otra, y ¡vamos! que no tienen solución, ancladas al pasado, ¿lo mejor seria que se mataran la una a la otra, que dejaran surgir y en paz a la tercera, la que quiere mirar al futuro, dejar en paz a los muertos y también a los vivos, que bastante tienen con resolver los problemas del presente y del futuro de España. Franco está muerto, como lo están los fusilados en las checas (cárceles soviéticas en Madrid), sus cuerpos pertenecen a la tierra, umbral ante el cual deben detenerse los vivos y no traspasarlo. Así se expresaba "Egin" en los años 90 del siglo pasado, en su colaboración de Iruñea, respecto a unos jóvenes que habían profanado una tumba de una victima de ETA. La tierra, poco a poco se irá comiendo sus nombres y su memoria. Mi sobrina 25 años, titulada universitaria en un posi escribiría todo lo que sabe de Franco. Se levanta una muralla entre ambos, y ninguno debe traspasarla. Ni los unos pueden abandonar el Hades, ni los otros entrar en el. Pero, el tema de las dos Españas, atajar la corrupción y la desaparición del Estado no se solucionarán nunca desde la política (los políticos son la causa, el problema, no la solución), ni desde dentro de las estructuras del Estado. Así, en el tema de la corrupción (caso Pujol, Bankia etc están haciendo mas los equipos de anticorrupción de la Guardia Civil y Policía, que quienes por lógica y obligación deberían hacerlo: gobierno, jueces y fiscales. De la misma manera que el GAL lo levantó la prensa.

 

Tanto en España como en la humanidad, está teniendo lugar una lucha feroz entre el individuo y el hombre masa. Su origen está en la Ilustración, la cual trató de destruir todos los mitos heredados, para llegar a la emancipación del hombre. El individuo, el independiente constituyen la punta de lanza, la vanguardia que abre camino, lo mejor de la humanidad, pero topa con el hombre común, indiferenciado y con espíritu de rebaño, que odia al individuo y le teme cuando ve que aquél puede vivir solo y sin necesitar a la grey. Entonces le condena (Platón fue vendido como esclavo), le margina, le persigue (Anaxágoras tuvo que salir huyendo de Atenas) y hasta le asesina (caso de Sócrates). Todos ellos eran independientes, crearon su propia filosofía al margen de los poderes establecidos.


Hoy, nuestra sociedad es la sociedad del marketing, que va dirigida al hombre masa, muy pocos se atreven a obrar según esquemas ajenos al sistema, el orden social se resiente, la justicia se acomoda en cada caso a lo que se considera político y la paz deja de ser un bien colectivo.

El líder es un aspirante a dictador, un enemigo de la democracia y del individuo. En este campo está trabajando mucho y bien la nueva Sortu, a la cual públicamente felicito y metafóricamente envió ramo de flores. El líder representa al hombre masa, no cree en nada ni en nadie, sólo en sí mismo. Sabe «olfatear» la necesidad ajena y promete soluciones que no tiene. Una variable del líder es el demagogo, un aprovechado, un estafador que vive haciéndose pasar por un taumaturgo transformador y creador. Pero en realidad desea mantener esas necesidades, pues vive de ellas, y al final lo que resuelve son sus problemas, los de su familia y amiguetes. Ni las dictaduras ni las democracias logran colocar a los mejores, («aristoi), en el poder, y, cuando se tiene poder sobre los demás, la posibilidad de hacer el mal es inmensa.

Reza la Biblia: «Nihil novum sub sole», nada nuevo bajo el sol.
 El alma del primer político (hombre masa) la crean y la justifican los filósofos griegos sofistas (que en griego significa sabios, compárese con la docta ignorancia de Sócrates. «Solo se que no se nada», siglo V a.C. dicen: la Verdad no la conoce nadie, por ello no hay que preocuparse por ella ni buscarla, lo que hay que conseguir es salir airoso en una discusión; un sofista al igual que un político profesional son capaces de demostrar una cosa y seguidamente la contraria. Sócrates y Aristóteles vistieron a los sofistas de nazarenos y los encorrieron con el «cirio». Aristóteles dijo que las dos tendencias mas fuertes en el hombre eran la política y... «Politeia» asuntos cívicos de la polis, Aristóteles la dignifica y la pone en un altar al que adorna con aromáticas flores, concibe la política como una carrera universitaria y le aplica una educación «paideia», que fue concebida por los griegos como una preparación de la politeia, en la que primará el Bien Común, y la enseñanza se hace de manera gratuita, mientras que los sofistas cobran por enseñar y la política se hace en beneficio propio o a grupos minoritarios. A lo largo de la historia se ha hecho la enseñanza de los sofistas, y la de Aristóteles la hemos tenido arrinconada y llena de polvo, hasta que nueva Sortu 2017 ha tomado ese testigo y el reto que se propuso y propuso a la posteridad, una política digna, frente a una política indigna de los docentes sofistas. En tecnología estamos en el siglo XXI, pero en democracia no hemos superado el siglo V a. C. sicofantes: abogados chantajistas, compra de votos a los pobres, etc. Enseguida se convirtió la democracia en oligarquía.



Hoy asistimos a una crisis institucional generalizada, crisis también en los valores éticos, La izquierda abertzale nos alerta de que estamos actuando  «contra natura», y pese a que es una cuestión de supervivencia pues al actuar, «contra natura» estamos quemando el suelo en que pisamos y propiciando nuestra propia autodestrucción. Y la educación hoy es un brebaje de egoísmo que da paso a la ambición, y ésta a la envidia, que también conduce a nuestra destrucción.