Iulen Lizaso Aldalur

Las dos almas de occidente

«El gran reto de los gobernantes es suministrar alimentos (nutritivos) a 7.000 millones de personas y el de los científicos, garantizar que sean seguros».

Finalizando la primavera de 2.016 se desató la «gran tormenta» mediática y moral, cuando un grupo de científicos en torno al centenar, alzó la voz para criticar  enérgicamente y plantar cara a la actitud obstruccionista del grupo ecologista Greenpeace a favor del cultivo, desarrollo y promoción del arroz dorado para la alimentación humana.

A ambos lados: la compañía que tiene la patente y los millones de personas que padecen malnutrición extrema; en medio o mejor dicho entremedias, un sector de la comunidad científica y el grupo ecologista, que aún no siendo el todo si son las partes mas audibles y mediaticamente visibles.

Gran polvareda y airada respuesta por parte del grupo ecologista cuando el grupo de 109 Nobeles decidieron alzar la voz para hacer saber a la sociedad occidental que la actitud obstruccionista de Greenpeace es: «Un crimen contra la humanidad» al tergiversar los riesgos, beneficios e impactos de los cultivos en base a semillas modificadas genéticamente (OGM).

Organismos mediática e institucionalmente tan prestigiosos como la OMS y UNICEF también se muestran muy críticos y preocupados por la actitud de los obstruccionistas cuando según el primero: «250 millones de personas padecen graves carencias de vitamina A siendo el 40% niños menores de cinco años» y para el segundo: «¿Cuanta gente pobre tiene que morir en el mundo antes de considerar esto (obstruccionismo) un crimen contra la humanidad?»

Con el TTIP tocando a la puerta de Europa, en su carta pública, los premios Nobel piden a esos gobernantes, que rechacen enérgicamente los argumentos del grupo opositor contra el arroz dorado y los cultivos en base a semillas mejoradas con biotecnología en general (a pesar del eufemismo, se referían a semillas modificadas en su alma): «La oposición basada en las emociones y el dogma y contradicha por los datos debe ser detenida» ¡exigen!

Y después de todo esto ¿que dice Greenpeace? El grupo ecologista y otra parte de la comunidad científica, a pesar de toda la argumentación, científico-moral y reconocimiento por parte de la inmensa mayoría de ciudadanos con voz en el planeta que justifica el medio, dice que a pesar de ello y en base a la memoria no emocional… hay que seguir actuando con cautela pues esos mismos gobernantes conocen los medios in situ para alcanzar ese fin.

Gobernantes que mas que insistir en ¿qué hacer? como medios, deberían resolver ¿cómo dejar de hacer? …como fin. Occidente desalmado y belicoso que como bien lo diagnosticó Bertolt Brecht: «¿De que sirve decir la verdad sobre el fascismo (referido a países que ya lo han hecho) si no se dice nada sobre el capitalismo (hoy neoliberalismo abrasivo y decadente del Ibex35) que lo origina?»
 
Occidente misógino, huérfano (des-madrado) y sin conciencia de ser, que embebido en su histórico patriarcalismo politico-religioso, hunde sus valores primigenios a cambio de un plato de arroz… sin alma.

Cuando el obispo de San Sebastián nos recuerda que: «El cuerpo no es una especie de prótesis que podamos cambiar o manipular a nuestro antojo» sino que es «icono del alma». Cuando Teresa de Ávila invitaba: «Debemos ser buenos con nuestro cuerpo para que al alma le guste vivir en él». Cuando el Maestro de todos los tiempos pide vivir atentos: «Por sus hechos los conoceréis» …ya que la salud y pervivencia del alma depende de si lo que entra por nuestra boca es alimento vivo o alimento muerto… y el alma es todo.

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