Iulen Lizaso Aldalur

Ingeniería lingüística

Si en lugar de solo a las personas, se pudiese usar el polígrafo para detectar las mentiras de prensa y en general de los medios de comunicación, desde hace casi dos años no pararía de pitar con la mayor parte de los datos, noticias y artículos referidos al covid.

En un artículo de la prensa del sábado 13, se hace un repaso sobre las medidas que se anuncian en diferentes países europeos, a raíz del pico que se prevé con esta sexta ola… y así frenarla.

He desmenuzado el artículo, para intentar aislar, detectar, separar y fotografiar el elemento motivo de alarma, que justifiquen esas medidas… y al igual que con el SARS-Cov2 no lo he encontrado, por lo cual cabe deducir que no existe.

Tras la observación separada de los parámetros literarios nocivos, publicitados como precursores del repunte de la sexta ola de la pandemia covid, son: «contagios», «casos», «infecciones», «positivos», «incidencia acumulada»… el exceso clínico de «asíntomáticos» ya les debe parecer en exceso infantilizante.

Por lo demás, parece que se repite la programación de primavera del 2020… y todo ello, siendo el primer dato del artículo: «El último informe del Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades advierte que el número de casos en la UE ha crecido por quinta semana consecutiva y alcanza ya los 383,9 por 100.000 habitantes…»

En otoño-invierno, con tasas de inmunización por la vacuna, de hasta el 72% en algunos países, el hecho de que un 0,3839%, sea motivo de alarma que incluyen medidas de hasta un nuevo confinamiento… ¡qué sospechoso!

Además ese 0,3839% son de «casos». Para nada mencionan «enfermos», ni «infectados sintomáticos», ni «exceso de muertos relativo a otros años en la misma fecha», ni «relación vacunados/no vacunados en los nuevos ingresos en planta y UCI…»

La mentira mediática y la mentira clínica de la PCR… los dos pies de barro que aún les permite sostener esta farsa médica… tan generosamente incentivada.

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