Aliento de la comunidad educativa al euskara
Hace un año, profesores y responsables de varios centros educativos de Hernani se reunieron en torno a la preocupación por el debilitamiento del uso del euskara y de la transmisión de la cultura vasca que observaban en sus centros. También advertían una tendencia a percibir el euskara en relación a una asignatura o actividad, así como la falta de medios para que los alumnos entiendan la situación de sometimiento y minorización en que se encuentra el euskara. Otra tendencia, aprovechada profusamente por el unionismo, es la de otorgar el mismo tratamiento a todas las lenguas, sin tener en cuenta, o ignorando deliberadamente, la situación de diglosia en Euskal Herria, por lo que se trata de un tratamiento no solo injusto, sino además incorrecto.
Cabe preguntarse si en Hernani existe preocupación en torno a la utilización y, por tanto, la salud del euskara, qué perciben los responsables y profesores de los centros de Portugalete, Gasteiz, Irun o Tutera. No faltarán «expertos» que vean desafección por un lado y las oportunidades que brindan las lenguas predominantes por otro, frente a la «imposición» del euskara, precisamente quienes exigen el mismo tratamiento para todas las lenguas en nombre de una curiosa igualdad. La situación descrita por los educadores hernaniarras, lógicamente, influye directamente tanto en la competencia lingüística como en el uso del euskara. De esa preocupación surgió Gu Geok, plataforma que presentaron ayer representantes de la dirección y el profesorado de todos los centros escolares de Hernani.
Como recuerda la nueva plataforma, también tienen decisiva influencia otros factores externos a los centros educativos, tanto en sentido positivo como negativo, pero indudablemente la comunidad educativa ha de ser agente activo del proceso de euskaldunización y normalización. En Hernani, esta se ha comprometido a aplicar el decálogo que ha elaborado como contribución al salto que ven preciso dar para fomentar el uso del euskara, para el que no es suficiente enseñar la lengua, sino que se han de formar hablantes activos.