Último intento de justicia para las víctimas de Pasaia
Han transcurrido casi 34 años desde la matanza de Pasaia, en la que Dioni Aizpuru, Rafael Delas, Pedro Mari Isart y José Mari Izura fueron abatidos a tiros por la Policía española. Sus familiares han acudido a Estrasburgo en busca de una justicia que en el Estado español se les ha negado de forma reiterada; la última en 2016 con el archivo de la causa. Han recibido el respaldo de los grupos europarlamentarios de PNV, EH Bildu y Ahal Dugu Podemos.
No hay autoridad judicial superior en defensa de los derechos fundamentales y a ella han acudido los familiares de las cuatro víctimas mortales que fueron acribilladas a balazos en la noche del 22 de marzo de 1984 en la bahía de Pasaia. El Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo tiene sobre la mesa el recurso que han presentado reclamando justicia para Dioni Aizpuru, Rafael Delas, Pedro Mari Isart y José Mari Izura. Recibieron en sus cuerpos al menos 113 balazos por parte de la Policía española en una emboscada perfectamente organizada. Joseba Merino fue el único superviviente del ataque contra los miembros de los Comandos Autónomos Anticapitalistas (CAA).
Los familiares informaron ayer en rueda de prensa sobre su último intento por arrojar luz y justicia a este caso que ha sido silenciado, y cuyo proceso de investigación ha sido constantemente torpedeado. Según denunciaron, no se realizaron «varias de las pruebas solicitadas» en el transcurso de la instrucción, como el de balística, y «no se investigó fehacientemente para determinar quienes fueron los autores de estos asesinatos». Otro tanto ha ocurrido con las salvajes torturas que sufrió Rosa Jimeno. Ella fue el cebo que empleó la Policía para que concertara una cita con los compañeros donde se perpetró el cuádruple crimen. «Nunca ha habido un interés real, y todas las pruebas han sido rechazadas», lamentaron.
Apoyo de europarlamentarios
La respuesta al recurso, sobre si es admitida o no, podría llegar dentro de unos meses. Temerosos de las presiones que podría ejercer el Estado español, admitieron no ser del todo optimistas. Sienten dolor, aún sufren. «Nuestro sufrimiento es cada vez mayor, estamos muy dolidos, pero seguiremos peleando porque la injusticia que cometieron contra nuestros familiares no quede impune», afirmaron.
Los familiares creen que «todos los esfuerzos han sido en vano». Peio Aizpuru y Carlos Delas, hermanos de dos de los fallecidos, recordaron ayer que en 2005 la Audiencia de Gipuzkoa «puso patas arriba la versión oficial» de lo ocurrido al afirmar «que no quedaba demostrado» que las víctimas, que acudían en zodiac desde el puerto de Ziburu a Pasaia realizasen disparos, tal y como argumentó la policía.
En 2016, el auto de archivo de la causa consideraba probado que «hubo cuatro asesinatos pero que no se podía aclarar quiénes fueron sus autores», señalaron. Han acudido al TEDH para acabar con la impunidad.
En ese camino de llevar el caso a Europa han recibido el respaldo y apoyo de las formaciones de EH Bildu, PNV y Ahal Dugu Podemos. Aunque una es la vía judicial y otra la política, los europarlamentarios Josu Juaristi, Izaskun Bilbao y Xabier Benito colaborarán desde Bruselas conjuntamente para dar a conocer el caso. Destacaron la estrecha colaboración que ya mantienen en materia de Memoria Histórica; así, barajan jornadas, foros y otras iniciativas sobre lo ocurrido en Pasaia.
«Impunidad es lo que ha ocurrido hasta ahora», declaró Juaristi. Bilbao hizo alusión a los toques que ha recibido el Estado español desde Estrasburgo en materia de derechos humanos, por lo que no descartó que esta vez vuelva a pasar.