El presidente del Parlamento, Alberto Catalán, ha presentado la encuesta del Navarrómetro, que arroja unos sorprendentes resultados y da un vuelco al panorama político de Nafarroa, donde se refleja el ansia de cambio de la sociedad y la caída del régimen actual.
De acuerdo con este sondeo, Podemos sería la primera fuerza en intención de voto e irrumpiría en el Parlamento con 18 escaños. UPN sufriría un gran batacazo y de los 19 escaños actuales se quedaría con 8, menos de la mitad. EH Bildu pasaría a ser la segunda fuerza parlamentaria, con 11 escaños; le seguiría el PSN, que perdería 4 y obtendría 5 representantes; Geroa Bai conseguiría 4; Izquierda-Ezkerra 2 (uno menos que ahora) y PP y UPyD, uno cada uno. No obstante, UPyD quedaría fuera de la Cámara, al no llegar al 3% necesario.
Con esos datos, las fuerzas que sutentan el actual régimen obtendrían solo 15 escaños, frente a los 30 que suman ahora UPN, PSN y PP. Las formaciones favorables al cambio (EH Bildu, Geroa Bai e I-E) sumarían 17 parlamentarios, y Podemos, que todavía no ha decidido si se va a presentar a las elecciones, obtendría 18.
Un indicador que apunta al fin de la hegemonía de las fuerzas unionistas es la valoración que los encuestados hacen tanto del Gobierno de Nafarroa como de la presidenta, Yolanda Barcina. La nota media que obtenía el Ejecutivo de UPN en 2010 era un 5, mientras que ahora suspende con un 3. En cuanto a Barcina, su valoración es aún peor, ya que del 4,5 que le concedían hace cuatro años ha bajado a una nota de 2.
El sondeo del Navarrómetro se efectuó del 3 al 7 de noviembre, una semana antes de que Yolanda Barcina anunciara su decisión de no presentarse a la reelección. Se ha elaborado por la empresa Orbere, a través de 1.500 entrevistas personales a domicilio, lo que supone un margen de error del 2,58% para un nivel de confianza del 95,5%.
La coordinadora del trabajo de campo del estudio, Lara Rodríguez, ha explicado que los resultados de las encuestas muestran «un descontento con la forma de ver la política en Navarra» y también en el conjunto del Estado. «En parte, está relacionado con escándalos como la red Púnica o las tarjetas black, lo que ha supuesto una declaración de castigo para las fuerzas que están en el marco parlamentario de Navarra», ha manifestado.