El presidente y consejero delegado de Volkswagen, Martin Winterkorn, ha presentado su dimisión y abandonará el cargo tras aceptar la «responsabilidad» en el caso de la manipulación de datos sobre emisiones de CO2 en EEUU, a pesar de defender «no haber hecho nada equivocado».
«Como consejero delegado, acepto la responsabilidad por las irregularidades halladas en los motores diésel y por ello he pedido al consejo de supervisión que apruebe mi cese en funciones como consejero delegado del grupo Volkswagen», ha afirmado el directivo. Pese a ello, se ha mostrado sorprendido con la noticia: «Me siento estupefacto ante la posibilidad de que una mala práctica de esta envergadura sea posible en el Grupo Volkswagen».
«Hago esto por el interés de la compañía, a pesar de que no he hecho nada malo», ha añadido Winterkorn en una nota. Asimismo, ha apuntado que Volkswagen «necesita aire fresco, también en términos de personal», un cambio que pretende «despejar» con su dimisión.
La multa a la que se puede enfrentar la empresa podría ascender hasta los 18.000 millones de dólares. Para hacer frente a esta situación, la compañía ha anunciado una provisión de 6.500 millones de euros.