Con el fin de reivindicar un «debate científico» pero obviando toda evidencia sobre el manifiesto efecto la vacunación está teniendo a la hora de combatir la pandemia, la plataforma Bizitza se ha manifestado en Donostia bajo el lema ‘Salud y libertad’. 

Los manifestantes, que en su gran mayoría no llevaban mascarilla, han recorrido la capital guipuzcoana pasando por el paseo de la Zurriola, el Boulevard, la calle Elkano y la avenida de la Libertad.

Durante la movilización, han coreado gritos como «los niños no se tocan», «no tengas miedo, es mentira», «el virus es el miedo», así como contra la vacunación frente al covid y contra el lehendakari de la CAV, Iñigo Urkullu.

Antes de la marcha, una representante de Bizitza ha procedido a la lectura de un comunicado y ha calificado de «absurdas y aberrantes» las medidas implantadas para la lucha contra el covid y han advertido de las «grandes consecuencias y secuelas» que pueden conllevar en los niños.

También ha denunciado el «crimen, irresponsabilidad y abuso infantil» que se está cometiendo y ha afirmado que se está «poniendo en riesgo su vida permitiendo que se les inocule un veneno que ya se ha demostrado que en muchos casos es letal».

Han señalado en folletos que han distribuido en la manifestación que las vacunas «son experimentales», «no inmunizan» y «dañan el sistema inmunitario».

También en Baiona

Por otro lado, también en Baiona se ha celebrado una protesta que, coincidiendo con otras movilizaciones en el Estado francés, ha denunciado las medidas anticovid, especialmente contra el «pasaporte covid» y contra la vacunación obligatoria del personal sanitario y de profesionales que trabajen habitualmente con personas vulnerables.  

Precisamente, la Asamblea Nacional francesa aprobó la madrugada del viernes en primera lectura el proyecto de ley que debe imponer el certificado covid para muchos actos corrientes de la vida social, como utilizar el transporte público de largo recorrido o tomar algo en un bar o un restaurante.

El texto, que prosigue su tramitación parlamentaria en el Senado, establece, además, la obligación de vacunarse para los citados sectores.