Una nueva investigación periodística del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus siglas en inglés) ha revelado este domingo que 14 líderes mundiales en activo escondieron fortunas de miles de millones de dólares para no pagar impuestos.
Entre otros, el rey Abdalá II de Jordania gastó 100 millones de dólares en casas de lujo en California y otros lugares, mientras que líderes de República Checa, Kenia y Ecuador ocultaron a las autoridades propiedades y dinero en efectivo, reveló ‘The Washington Post’, uno de los medios que ha publicado las filtraciones.
Figuran también en la lista el expresidente del FMI Dominique Strauss-Khan o el que fuera primer ministro británico Tony Blair.
En todos los continentes
Sobresalen igualmente tres jefes de Estado de Latinoamérica en activo: el ecuatoriano Guillermo Lasso, el chileno Sebastián Piñera y el dominicano Luis Abinader, siempres según estos medios.
Según la BBC, Lasso, que fue empresario y banquero, dejó de usar una entidad panameña para hacer pagos mensuales a sus familiares y empezó a utilizar otra entidad en Dakota del Sur (EE.UU.), un estado que se ha convertido en una especie de paraíso fiscal al nivel de algunas jurisdicciones de Europa y el Caribe.
Piñera tuvo supuestamente negocios secretos en las Islas Vírgenes Británicas y Abinader posee junto a otros familiares una entidad "offshore" en Panamá, de acuerdo al ‘Post’.
En los archivos también figuran 11 exmandatarios de Latinoamérica, como el peruano Pedro Pablo Kuczynski; el hondureño Porfirio Lobo; los colombianos César Gaviria y Andrés Pastrana; el paraguayo Horacio Cartes o los panameños Juan Carlos Varela, Ricardo Martinelli y Ernesto Pérez Balladares.
También aparece el presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, y seis familiares que tienen en propiedad una red de empresas en paraísos fiscales o el primer ministro de Pakistán, Imran Khan, cuyo entorno posee empresas por valor de millones de euros en paraísos fiscales.
En el caso del presidente ruso, Vladimir Putin, estos «papeles de Pandora» revelan propiedades en Mónaco mientras que el primer ministro checo, Andrej Babis, un multimillonario, no ha declarado una empresa que posee dos mansiones de 12 millones de dólares en el sur de Francia. En el caso de Babis la revelación podría tener consecuencias políticas inmediatas, puesto que su partido, Alianza de Ciudadanos Descontentos, es el favorito para las elecciones legislativas del 8 y 9 de octubre.
También el presidente chipriota, Nicos Anastasiades, tiene testaferros que tienen en propiedad empresas en paraísos fiscales, igual que el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, que cuenta con una fundación en Panamá que hace desembolsos mensuales a su familia.
Otro de los nombres que aparecen es el del presidente azerí, Ilham Aliyev, y su familia, acusados de expoliar las riquezas de su propio país. Según la investigación, el entorno de Aliyev ha comprado propiedades en reunio unido por más de 400 millones de libras (unos 467 millones de euros). Una de las propiedades de Aliyev se vendió a la Casa Real británica con un beneficio de 31 millones de libras.
El ICIJ, con sede en Washington y famoso por los llamados «papeles de Panamá», ha bautizado esta nueva investigación como los «papeles de Pandora» y asegura que en ella han participado 600 periodistas que han examinado 1,9 millones de documentos.
Ancelotti, Guardiola, Julio Iglesias, Shakira, Bosé...
Por lo que respecta al Estado español, en las primeras noticias aparecidas hoy en ‘El País’ y La Sexta se cita a los entrenadores Carlo Ancelotti (Real Madrid) y Pep Guardiola (Manchester City) y a tres músicos archifamosos, Julio Iglesias, Shakira y Miguel Bosé, entre otros.
No obstante, se apunta que tirando de los hilos disponibles se ha llegado ya a identificar a 600 personas en el Estado español, por lo que la mayor parte está sin desvelarse aún y queda quizás para próximas entregas.
A nivel internacional hay otros músicos como Elton John o Ringo Starr, o la modelo Claudia Schiffer.
Se les implica en la utlización de sociedades "offshore" para eludir impuestos. ‘El País’ apunta que, como ocurrió ya con los «papeles de Panamá», algunas de las actividades descubiertas no están tipificadas como delito.