El Consejo Vasco de Finanzas Públicas (CVFP) ha acordado deflactar el IRPF un 2,5% en 2024. Así lo ha anunciado el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, quien ha recordado que la deflactación, que tiene por objeto compensar la pérdida de poder adquisitivo derivada del aumento de la inflación, no es una herramienta «extraordinaria».
«Ha habido años que se ha hecho con más intensidad porque el problema de la inflación era mayor, como ocurrió el año pasado», ha explicado en respuesta a las preguntas de los medios. Entonces alcanzó el 7,5%, y el 2,5% se sumará a dicho porcentaje, ya que, como él mismo ha indicado, se trata de «un proceso acumulativo».
«En función de la tasa que tenemos estimada para este año y el siguiente creemos que se puede compensar de forma importante el problema de la inflación», ha aseverado, incidiendo en que se trata de una decisión adoptada en el seno del CVFP, donde participan Lakua, las diputaciones de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa y Eudel.
No obstante, el visto bueno definitivo a la nueva deflactación, cuyo impacto se estima en 100 millones de euros, recaerá en las Juntas Generales, encargadas de aprobar los presupuestos forales. En el caso de Bizkaia, el Ejecutivo de Elixabete Etxanobe cuenta con mayoría absoluta, pero en Gipuzkoa y Araba, PNV y PSE deberán buscar el apoyo de una tercera formación.
Y no será fácil, ya que la deflactación es una polémica medida que suscita recelos en el propio seno del Gobierno. El secretario general del PSE, Eneko Andueza, el año pasado ya advirtió de que es «claramente insuficiente»: «No puede considerarse una solución definitiva para paliar la pérdida de capacidad adquisitiva de los contribuyentes».
EH Bildu también mostró su rechazo a una medida «regresiva» aplicada en administraciones gobernadas por el PP, como es el caso de la Comunidad de Madrid.
Preguntado sobre estas diferencias, Azpiazu ha señalado que la deflactación «no tiene que ser un motivo de conflicto». «Creo que la tasa del 2,5% es razonable», ha apuntado tras dar cuenta de las previsiones de recaudación para los ejercicios 2023 y 2024.
Ingresos y previsiones
En lo que respecta a este curso, las haciendas forales esperan ingresar 18.102 millones de euros, un 5,7% más que el pasado curso. Y en el año viene estiman que la recaudación alcanzará los 19.000 millones de euros.
Cabe señalar que dicho aumento estará propiciado por la subida del dinero recaudado a través del IRPF, que, según las estimaciones, pasará de 6.998 millones en 2023 a 7.222 millones en 2024. Los ingresos por IVA crecerán de 7.013 millones a 7.552 millones.
Muy diferente será el comportamiento del Impuesto de Sociedades, que crecerá levemente, de 1.578 millones a 1.587 millones de euros. En el caso de Araba y Gipuzkoa bajará, de 300 millones a 294 en el caso del primer herrialde, y de 407 a 378 millones en el segundo.
El diputado general de Araba, Ramiro González, ha quitado hierro al asunto, recordado que «hemos tenido dos ejercicios extraordinariamente buenos respecto al crecimiento del Impuesto de Sociedades», creciendo este curso un 16%. «Y cuando comparamos, lo hacemos con el año anterior, por eso no prevemos un crecimiento del Impuesto de Sociedades».
Por su parte, la diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza, ha subrayado que «las cifras que hemos tenido son de récord». «No hemos tenido cifras de estas desde el año 2008», ha añadido, reconociendo que mantienen una posición de «prudencia».
No en vano, el propio Azpiazu ha reconocido que se atisba un «escenario económico complejo»; y ha alertado de que «la Industria muestra una rápida pérdida de intensidad, la Construcción retoma su ritmo de crecimiento intenso y los Servicios frenan su crecimiento».
Sin embargo, confía en que la economía de la CAV crezca este año un 1,7% y un 2,1% en 2024. En cuanto el empleo, prevén la creación de 13.000 puestos de trabajo netos en 2023 y 16.00 el próximo curso. «Gracias a ello, podremos ver una tasa de paro por debajo del 7%», ha manifestado.
En cuanto al Impuesto sobre Grandes Fortunas, ha dicho que el asunto no se ha tratado en el orden del día y no ha dado datos concretos sobre la recaudación prevista. «Su importancia cuantitativa es muy limitada y en nuestras previsiones lo incluimos en el Impuesto de Patrimonio», ha explicado. Y tampoco se ha tratado la posibilidad de implementar una reforma fiscal.