El primer ministro británico, Rishi Sunak, ha anunciado este miércoles a las puertas del número 10 de Downing Street que las elecciones generales se celebrarán el próximo 4 de julio, medio año antes de la fecha prevista.
«Ahora es el momento de que Reino Unido elija su futuro», ha señalado el ‘premier’ británico, que ha confirmado su candidatura y ha repasado alguno de los logros recientes «durante el momento más complejo desde la Segunda Guerra Mundial», destacando por encima de otros la mejora de los datos económicos.
Bajo la incesante lluvia londinense, el primer ministro ha comparecido durante algo menos de ocho minutos para explicar a los medios que ha informado previamente al rey Carlos III de su intención de llamar a las urnas el 4 de julio, pese a que podía hacerlo en cualquier momento antes del 28 de enero, fin de la legislatura.
Tras asegurar que el país ha atravesado su momento más complicado desde la II Guerra Mundial, Sunak ha asegurado que su Gobierno se ha centrado en devolver la estabilidad económica al país tras la pandemia.
«Llegué al Gobierno prometiendo estabilidad económica, y gracias al esfuerzo colectivo hemos conseguido dos hitos: nuestra economía está creciendo más rápido de lo que nadie preveía (...) y la inflación ha vuelto a la normalidad. Esto es la prueba de que nuestras prioridades están funcionando», ha añadido.
«La pregunta ahora es: ¿A quién se le confía convertir esa fundación en un futuro seguro para usted, su familia y nuestro país? Ahora es el momento para que Reino Unido elija su futuro. Decidir si queremos construir en el progreso que hemos hecho, o arriesgarnos a volver a un esquema sin plan», ha manifestado.
Con estas palabras, Sunak ha incidido en su convencimiento de «hacer lo que es bueno» para el país. «No puedo decir lo mismo del Partido Laborista, porque no sé lo que ofrecen. En realidad, tampoco creo que ustedes lo sepan, y eso es porque no tienen un plan», ha aseverado el líder conservador.
En este punto, el mandatario británico ha dado paso a una serie de críticas a los laboristas y su líder, Keir Starmer, quien, según él, «ha demostrado una y otra vez que tomará el camino fácil y hará cualquier cosa para hacerse con el poder».
«Si no tienes la convicción de seguir adelante con lo que dices, si no tienes el coraje de decirle a la gente lo que quieres hacer, y si no tienes un plan, ¿cómo podrías ser el primer ministro?», ha remachado un Sunak que confía en liderar un nuevo Gobierno que «restaure el orgullo y la confianza» en el país.
Posible mayoría absoluta de los ‘tories’
El anuncio ha pillado por sorpresa a analistas y expertos, a tenor de la distancia de unos 20 puntos que las encuestas otorgan a los laboristas sobre los ‘tories’, que les podrían resultar suficientes para alcanzar la mayoría absoluta.
Además, hace solo tres semanas se celebraron unas elecciones municipales en las que los conservadores tuvieron unos resultados históricamente bajos, con la pérdida de la mitad de sus concejales en las localidades donde se votaba.
El posible adelanto electoral ha estado sobre la mesa en los últimos meses debido a las tensiones internas en el seno del Partido Conservador, si bien este mismo miércoles Sunak se había limitado a ceñirse a su mensaje de que la votación tendría lugar en la segunda mitad del año. Por su parte, el Partido Laborista se erige en las encuestas como el favorito para hacerse con la victoria.