En una rueda de prensa, Ibaibarriaga ha asegurado que el coso bilbaino ha entrado en números rojos, según la auditoría encargada por la Junta Administrativa de la Plaza de Toros a la empresa Sbayc.

En 2014, la plaza arrojó unas pérdidas de 14.939 euros, frente a los 74.527 euros de beneficio de 2013 y los 104.768 euros en 2012.

Para la edil, estos datos oficiales «dejan en evidencia que los toros son un negocio ruinoso para las arcas públicas de esta ciudad».

La plaza de toros es propiedad del Ayuntamiento en un 50% y la Misericordia, la propietaria de la otra mitad, está participada en otro 50% por el Consistorio.

A estos números rojos habría que sumar, según EH Bildu, otros 65.000 euros gastados directamente por el Ayuntamiento (45.000 por el área de Alcaldía en la compra de abonos para repartir entre concejales y altos directivos; y 20.000 por Acción Social para asociaciones de jubilados), de manera que sin esta subvención encubierta «estaríamos hablando de un déficit de 80.000 euros».

Ibaibarriaga ha opinado que la plaza, «además de ser un espacio de maltrato animal, no cumple la función social que se le supone, y que no es otra que contribuir a la financiación de la Casa de Misericordia, ya que al menos en los últimos tres años no ha destinado ni un solo euro a la Misericordia».

Su conclusión es que la actual plaza de toros «no solo es un lugar donde se maltrata a animales para regocijo macabro de unos pocos, sino que además no es rentable».

Por ello, EH Bildu considera que es el momento de abrir un debate serio sobre el uso de la plaza de toros, y, como adelantó en la pasada campaña, propone transformarla en la Plaza de Ocio Vista Alegre, con un espacio central abierto para conciertos y otras actividades, con pista de patinaje, entre otras cosas.

Propuesta de EH Bildu para transformar la plaza de toros.