En rueda de prensa en Bilbo, la portavoz de EH Bildu, Aitziber Ibaibarriaga, ha exigido la retirada de los retratos, así como la revocación de todos los títulos, premios o medallas otorgadas por las corporaciones municipales franquistas desde el 19 de junio de 1937 hasta abril de 1979, que, tal y como ha podido comprobar la coalición soberanista, asciende a 502.

La portavoz de EH Bildu ha comenzado su intervención frente al retrato de Jose Felix Lekerika Erkiza, alcalde franquista y «criminal de guerra y colaborador activo de la Gestapo nazi», según ha dicho.

Ibaibarriaga ha recordado que la represión franquista en Euskal Herria fue «brutal y generalizada», razón por la cual ha calificado de «acto de enaltecimiento de una cruel dictadura y humillación para las miles de víctimas de la represión franquista» que el Ayuntamiento exponga en un lugar «público y privilegiado los retratos de los alcaldes y alcaldesa de ese oscuro periodo».

La portavoz ha indicado que, al menos, cuatro de esos alcaldes, José Maria Areilza Martínez, José Maria González de Kareaga Urkijo, Felix Lekerika Erkiza y Jose Maria Oriol Urkijo, «tuvieron grandes responsabilidades en el fusilamiento de personas y dirigentes políticos democráticos y la persecución y depuración de miles de personas». «Lo mismo que sería impensable e inaceptable que el retrato de Hitler o sus ministros estuviera en el Bundestag aquí también es incomprensible. Estos cuadros se debían haber retirado hace mucho tiempo», ha señalado.

Aitziber Ibaibarriaga ha recordado que en octubre de 2012 el Departamento de Interior, Justicia y Administración Pública del Gobierno de Lakua emitió un dictamen recomendatorio de la Comisión Técnica para la retirada de símbolos franquistas en la CAV, dictamen que ha sido recientemente remitido a todos los ayuntamientos, incluido el de Bilbo, por el propio ejecutivo y EUDEL.

Tal y como publico GARA el pasado lunes, el Ayuntamiento de Bilbo mantiene honores y distinciones a destacados franquistas.

«No mirar hacia otro lado»

Por ello, la portavoz soberanista ha reclamado al Consistorio que «no mire a otro lado», haga caso al dictamen y, en consecuencia, aplique sin dilación la Ley de Memoria Histórica que ordena a las administraciones la «retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura».

Ibaibarriaga ha explicado que el dictamen aborda cinco aspectos: revisión del callejero, símbolos y escudos, placas de viviendas, cuadros de cargos públicos y designaciones de hijos predilectos, y «desafortunadamente en todos ellos se hace referencia a incumplimientos en Bilbao».

Ha hecho especial hincapié en la cuestión de las distinciones. Ibaibarriaga ha señalado que entre el 19 de junio de 1937 y abril de 1979 las diferentes corporaciones franquistas otorgaron 57 Medallas de Oro, 29 de Plata, 427 de Bronce, 3 Hijos Predilectos, 5 Adoptivos y 1 Alcalde Honorario. De ellas, únicamente 20 fueron revocadas en el pleno de mayo de 2001.

Entre las 502 que quedan sin revocar, Ibaibarriaga ha destacado que seis fueron otorgadas a «sendos criminales de guerra, los militares Fidel Dávila Alonso (sustituto de Mola en la ofensiva contra Bilbo), Luis Orgaz Ioldi (general) y los ministros de franco Esteban Bilbao Egia (Justicia), Juan Vigón Suerodíaz (militar y ministro del Aire), Blas Pérez González (Gobernación y militar) y Eduardo González Gallarza (militar y ministro del Aire)», imputados por Garzón en 2008 por «detención ilegal y crímenes contra la humanidad». «Ya es hora de que se revoque el resto», ha dicho.

Entre el resto de condecorados destacan 196 militares franquistas, «siendo 37 de ellos militares de alta graduación, seis alcaldes y dos concejales franquistas, cuatro gobernadores civiles, cuatro jefes de Falange, 10 ministros franquistas y 3 altos cargos de la administración franquista».